Es así como la vivienda se adapta al entorno, se cierra al norte y se abre al sur. El terreno circundante protege y da inercia a los recintos que regulan la temperatura interior, dando como resultado que la casa se disfrute de forma diferente según la hora del día y la época del año.
Descripción del proyecto por Trespes.arquitectos
La vivienda en Ribela es el resultado de un diálogo intenso. En primera instancia, entre dos familias que deciden compartir una parcela y por otro lado el lugar.
La integración de la vivienda en el paisaje es una decisión de diseño. La parcela forma el límite del núcleo rural y se trata de minimizar su impacto paisajístico. Este es un territorio muy antropizado. Las terrazas agrícolas, tan habituales en las riberas del Miño y Sil, nos indicaban cómo debía ser la inserción de la casa en la topografía.
La intersección del paisaje y las relaciones entre las tres piezas principales (Vivienda Existente, Vivienda Nueva y Piscina) provoca la necesidad de obtener una “cota 0” común. Así surge la idea de enterrar la casa y crear un espacio limitado e íntimo para la nueva residencia.
La propuesta parte del esquema de la vivienda tradicional meridional de la provincia de Ourense que se organiza en torno a un patio cerrado por grandes muros. En esta tipología se accede a través de un gran portón de madera. Junto a esta muralla estaban los servicios [Bodega, Alpendres y Almacenes] y el Hórreo. Desde el patio, por una escalera, se accedía a la casa en planta alta, debajo los establos.
El patio excavado de la casa funciona exactamente igual, a él se abren las estancias de servicio [Garaje, Instalaciones/trastero, Cuarto de usos múltiples, Cocina, Aseo, Sala de Juegos y Lavandería/Tendedero]. Por el contrario, los espacios servidos [Salón y Dormitorios] se abren a la parcela. La escalera sube a la atalaya que es la cubierta vegetal transitable, un lugar increíble para perderse contemplando el hermoso meandro del río Miño.
La vivienda se adapta al entorno, se cierra al norte y se abre al sur [rompiendo las esquinas del salón y los dormitorios]. Se buscan ventilaciones cruzadas [Patio-Parcela]. El terreno circundante lo protege y da inercia a los recintos que regulan la temperatura interior. La casa se disfrutará de forma diferente según la hora del día y la época del año.
En los calurosos veranos de Ourense, la vida se hace en el interior del patio por la mañana. Por la tarde la terraza de la cocina y las piscinas son los lugares más privilegiados. En los inviernos, el ancho del patio no oscurece las habitaciones, lo que hace que la parcela sea el espacio al aire libre más utilizado.