Construida en un pequeño terreno de 300 m2, la Casa Zicatela utiliza una tipología de arquitectura defensiva, donde un muro rodea el terreno por completo. En el centro de la parcela se disponen los espacios comunes de la vivienda —salón, comedor y cocina— volcados completamente al patio. Las gradas que rodean el jardín permiten acceder a un segundo nivel, donde es posible disfrutar de la vista del paisaje circundante.
Casa Zicatela por Ludwig Godefroy Architecture. Fotografía por Rory Gardiner.
Casa Zicatela por Ludwig Godefroy Architecture. Fotografía por Rory Gardiner.
Casa Zicatela por Ludwig Godefroy Architecture. Fotografía por Rory Gardiner.
Descripción del proyecto por Ludwig Godefroy Architecture
Casa Zicatela es una pequeña casa de fin de semana ubicada en lo alto de una colina frente a la playa Zicatela, al lado de Puerto Escondido en el estado de Oaxaca, México.
La casa fue diseñada con un propósito principal: darle al propietario la oportunidad de salir de la Ciudad de México para romper con la megalópolis y los hábitos urbanos, viniendo a descansar y relajarse mientras disfruta del calor de la costa mexicana y la paz de la luz de Oaxaca.
Esta casa responde a un doble paisaje, de un lado al fondo la playa y el mar, del otro lado las montañas y los campos de agave, planta con la que se elabora el mezcal y el tequila. Este proyecto tiene una personalidad muy interesante de ser una casa de campo junto al mar, en lugar de una casa de playa.
La casa se basa en esta dualidad, la dualidad de su entorno y es capaz de responder a las montañas y ser protectora tanto como una fortaleza como un espacio amplio y abierto; dándote la sensación de vivir al aire libre en un jardín, haciendo que la frontera entre el interior y el exterior desaparezca.
Casa Zicatela está construida en un pequeño terreno de 300 m2, utilizando una tipología de arquitectura defensiva, donde un muro rodea el terreno por completo, ayudando a crear un área 100% controlada en el interior, convirtiéndolo en una fortaleza a cielo abierto, con una sola vista hacia el cielo, único elemento permanente en el tiempo.
La casa es un búnker por fuera, una de esas enormes estructuras de hormigón que solía ver en Normandía -donde nací-, protegiendo una pirámide mexicana por dentro, una de esas que suelo ver cuando viajo por México, el país donde hace 10 años que vivo y trabajo.