En un edificio en el que las reglas y las normas reinan, los movimientos arquitectónicos son muchos y acentuados. Las líneas, unas veces físicas otras veces imaginarias, definen los bordes entre lo público y lo privado y entre lo antiguo y lo contemporáneo. La iluminación, desarrollada por CCM2 en colaboración con LumiGroup, tiene un papel protagonista en el resultado de este concepto dual.
Desde la entrada, el techo está iluminado por líneas de fluorescentes que guían a los invitados hacia una gran escalera (un símbolo identificativo de las grandes instituciones públicas en la arquitectura clásica), aquí tratada con modernidad y fantasía, dando una pausa a la consistencia del espacio en general. El exterior de esta magnífica escalera está hecho de madera negra de fresno, en contraste con el puro y blanco cuarzo de los peldaños y los muros interiores varnizados. El efecto se magnifica con iluminación tipo LED, oculta dentro de la parte superior de los raíles.
Continuando nuestro ascenso a la planta superior, que alberga los espacios de espera, reuniones y salas de vistas, la línea de luz reaparece en un zigzag vertical suspendido, terminando bajo el gran catedralicio techo, como un movimiento poco común de conjelación del tiempo, proporcionando algo de iluminación en este mundo estructurado.
La iluminación vuelve a su papel primario en el concurso, donde el ambiente retoma un mundo de orden. Las continuas líneas de luz están suspendidas del techo a lo largo del ancho vestíbulo, mientras que las rayas verticales de luz empotradas limitan nuestro viaje y puntúan el espacio.
La iluminación de las salas de vistas, una zona jerárquica por naturaleza, juega un importante papel creando una barrera psicológica entre el espacio público y el espacio reservado al poder judicial. Este concepto de crear bordes usando la luz también se aplica en el resto del edificio.
Además, para responder a las necesidades específicas de iluminación, en términos de seguridad y funcionalidad, la iluminación propuesta por los arquitectos y LumiGroup ha tenido que gestionar el potencial creativo de la iluminación, dando lugar a una energía contemporánea distintiva para el palacio de justicia de Montmagny.
