La Galería Travesía Cuatro de Madrid presenta la exposición Nocturnos, del artista mexicano Jorge Méndez Blake, en la que es su tercera exposición individual en dicho espacio. Méndez Blake continúa su investigación de largo plazo sobre la literatura y su repercusión en las artes visuales.
En esta ocasión, el artista centra su interés en el "nocturno", género lírico desarrollado extensamente en el romanticismo y en el modernismo. En España y Latinoamérica fue motivo de obras de escritores como Rubén Darío, Leopoldo Lugones, Federico García Lorca o José Asunción Silva; en México, por el grupo de 'Los contemporáneos', formado por escritores como Salvador Novo, Antonieta Rivas Mercado, José Gorostiza y Xavier Villaurrutia, quien lo utilizó como columna vertebral de un libro esencial en la historia de la poesía mexicana del siglo XX: Nostalgia de la muerte.
Méndez Blake escoge esta obra para realizar un ejercicio de disección poética. Entre otros poemas, Nostalgia de la muerte incluye diecisiete nocturnos. Se trata de poemas en torno a la muerte, la soledad, la noche, el deseo, el amor, lo prohibido, el vacío, lo espiritual... paradigmas del género del nocturno y de la poesía moderna.
El texto de estos diecisiete nocturnos es analizado por el artista para realizar dos grupos de trabajo, siguiendo la tradición de la poesía concreta: una serie de cuatro pinturas de gran formato, en las cuales utiliza cada una de las palabras (incluyendo signos de puntuación) que los componen y una serie de composiciones realizadas con máquina de escribir sobre papel.
El nocturno es una composición íntima, pero a la vez es un descubrimiento de la ciudad de noche, de sus personajes solitarios, cobijo de lo prohibido, es el escenario a oscuras del escritor moderno y surrealista. Méndez Blake muestra adicionalmente un proyecto de una plaza, que pudiera ser el escenario de un nocturno, un espacio suspendido entre el sueño y el deseo.
En esta ocasión, el artista centra su interés en el "nocturno", género lírico desarrollado extensamente en el romanticismo y en el modernismo. En España y Latinoamérica fue motivo de obras de escritores como Rubén Darío, Leopoldo Lugones, Federico García Lorca o José Asunción Silva; en México, por el grupo de 'Los contemporáneos', formado por escritores como Salvador Novo, Antonieta Rivas Mercado, José Gorostiza y Xavier Villaurrutia, quien lo utilizó como columna vertebral de un libro esencial en la historia de la poesía mexicana del siglo XX: Nostalgia de la muerte.
Méndez Blake escoge esta obra para realizar un ejercicio de disección poética. Entre otros poemas, Nostalgia de la muerte incluye diecisiete nocturnos. Se trata de poemas en torno a la muerte, la soledad, la noche, el deseo, el amor, lo prohibido, el vacío, lo espiritual... paradigmas del género del nocturno y de la poesía moderna.
El texto de estos diecisiete nocturnos es analizado por el artista para realizar dos grupos de trabajo, siguiendo la tradición de la poesía concreta: una serie de cuatro pinturas de gran formato, en las cuales utiliza cada una de las palabras (incluyendo signos de puntuación) que los componen y una serie de composiciones realizadas con máquina de escribir sobre papel.
El nocturno es una composición íntima, pero a la vez es un descubrimiento de la ciudad de noche, de sus personajes solitarios, cobijo de lo prohibido, es el escenario a oscuras del escritor moderno y surrealista. Méndez Blake muestra adicionalmente un proyecto de una plaza, que pudiera ser el escenario de un nocturno, un espacio suspendido entre el sueño y el deseo.