El equipo de diseño concibió varias estructuras en forma de arco para mantener el orden espacial, con el fin de reforzar la conexión entre la arquitectura y la calle, además de conseguir ampliar la superficie útil de forma natural.
El resultado es una agradable experiencia sensorial que interpreta perfectamente las emociones del espacio, realzando la tensión visual y la estratificación, creando así una imagen distintiva para el bar.
Descripción del proyecto por Return
Seveneód es un bar de whisky situado en la ciudad de Quanzhou. El diseño logra una integración orgánica, que explora lo desconocido a la vez que hereda la historia del lugar. El lugar lo ocupaba anteriormente la fábrica de frutas preservadas Yuanhetang, un moderno patrimonio industrial, cuyos espíritus de fabricación, sabor y recuerdos tienen algo en común con el nuevo bar de whisky.
La búsqueda de ingredientes naturales y la constante exploración de las técnicas de destilación han contribuido a que el whisky se convierta en un símbolo cultural con una historia de casi 500 años. Partiendo de la historia del lugar y del atributo del proyecto, se tomó como concepto de diseño espacial el espíritu de la elaboración del whisky: "exploración sin fin".
01. Entrada aislada en forma de barril
La entrada principal en forma de barril, con un sentido de espiritualidad y ritual, conduce a la gente a un mundo de whisky inmersivo desde la realidad. El hábil uso de los materiales aísla sutilmente el espacio interior del exterior y lo dota de una sensación de dramatismo, lo que lleva a los clientes a un viaje espiritual con temática de whisky.
Las finas líneas doradas del logotipo del bar se extienden hasta la pared exterior, lo que unifica el estilo general del espacio de entrada y atrae la atención visual. Incluso a simple vista, las líneas pueden impresionar y sorprender a los clientes. La alternancia entre lo cóncavo y lo convexo de la pared rompe la monotonía y la planitud, a la vez que realza la tensión visual y la estratificación, creando así una imagen distintiva para el bar.
02. El "túnel del tiempo" oculto
Cómo crear un entorno acogedor y relajante que combine la comodidad y la sorpresa dentro de un espacio limitado y que, al mismo tiempo, encaje en el atributo del bar de whisky, supuso un gran reto. En respuesta, el equipo de diseño concibió varias estructuras en forma de arco para ajustar la altura de la planta y mantener el orden espacial, con el fin de reforzar la conexión entre la arquitectura y la calle y ampliar el espacio de forma natural.
La zona de asientos rodeada por el área funcional principal ocupa dos tercios de todo el espacio. Las variaciones de las superficies funcionales optimizan los efectos acústicos y, al mismo tiempo, proporcionan un cómodo campo de visión. Las líneas del techo suspendido en forma de arco producen una continuidad vertical y una mayor sensación de tiempo y espacio, creando así un "túnel del tiempo" con texturas simplistas y una escala adecuada.
Teniendo en cuenta el atributo comercial del bar de whisky, el equipo de diseño no colocó sofás ni cabinas, sino que dispuso algunos asientos individuales, para reducir el ruido y mantener el efecto visual dramático junto con la sensación de espacio.
La fragancia distintiva del whisky recuerda el gusto y la pasión escoceses, y su pureza es comparable a la de las almas no adulteradas. El ambiente apropiadamente achispado elimina el cansancio de los huéspedes y los sumerge en el sabor del whisky o en la interacción con los amigos. Además, el espacio ofrece un refugio aislado, donde los clientes pueden alejarse temporalmente del ajetreo de la vida cotidiana.
La iluminación de la zona del bar y de los asientos refleja los atributos sociales y culturales. La iluminación llena el espacio de un ambiente tranquilo y agradable, encarnando las características y la cultura de los bares de whisky convencionales y mostrando la preferencia del cliente.
03. Ecos curativos
En comparación con el sonido fuerte y ruidoso de otros bares de vinos que golpea el tímpano, SEVENEÓD prefiere la música suave para que los clientes se sientan cómodos física y emocionalmente. La fragancia del whisky, junto con la atmósfera espacial moderadamente achispada y confortable, ayuda a relajar y sanar la mente.
La lámpara principal suspendida sobre el escenario es como una gota de agua que cuelga en el aire, con un color de iluminación que cambia del blanco en el centro al azul en la periferia. Su gradiente de color y su forma curvada hacen posible la fusión de funcionalidad y estética, no sólo para iluminar a la banda que actúa, sino también para mejorar el efecto del escenario.
La luz brillante lineal que se refleja en la pared curvada del pasillo crea un sorprendente realce visual en el espacio de tonos oscuros, y desempeña la función de guiar a los invitados.
El tono azul frío es tranquilo, pero no melancólico, y genera un contraste con el color rojo anaranjado, cálido y de bajo perfil. La integración armoniosa de tonos fríos y cálidos crea una experiencia visual impresionante, se hace eco de las señales emocionales del diseño y amplía la atmósfera parcial al espacio general.
La combinación de pintura texturizada y metal aporta efectos de iluminación y música perfectos. La iluminación de bajo nivel reflejada por la pintura texturizada muestra un marcado contraste con la iluminación ambiental complementada por el metal. Las texturas cóncavas y convexas de las superficies dan al bar un mejor efecto sonoro. Los diseños visual y acústico armonizan entre sí, generando así una agradable experiencia sensorial e interpretando perfectamente las emociones del espacio.
Mediante la fusión de un concepto de diseño único, técnicas de diseño creativas y whisky puro y suave, el equipo de diseño creó un espacio que satisface las expectativas del cliente y ofrece un refugio urbano que reconforta, relaja y sana la mente.