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En el estudio OOIIO Architecture creen que las opciones estandarizadas de vivienda más económicas pueden ser replicadas con facilidad, impidiendo que cada vivienda se adapte al estilo de vida del usuario. El estudio emplea materiales fácilmente disponibles, con un presupuesto asequible, aprovechando las oportunidades que el factor ofrece, para crear una vivienda personalizada, única y original.
El proyecto destaca por sus detalles cerámicos de forma colorida que se colocan en lugares inesperados transformando el espacio en un lugar único. En la zona del salón, el arrimado cerámico recuerda a un patio al aire libre, mientras que el dormitorio se entrelaza con el salón continuando con un paisaje donde la lámpara se convierte en sol. La cocina emplea una paleta de colores similar al resto de la casa, con una encimara revestida de madera y puertas blancas.
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Casa TUR por OOIIO Architecture. Fotografía por Javier de Paz.
Descripción del proyecto por OOIIO Architecture
La tendencia actual en el mercado de la construcción nos lleva hacia un mundo de soluciones industrializadas y repetitivas. Las grandes promotoras ofrecen viviendas «talla única», con acabados en materiales neutros y anodinos. Al ofrecer productos estandarizados, pueden atraer a un abanico más amplio de compradores y asegurar una venta más rápida y sencilla.
Pero, ¿qué ocurre con quienes buscan una casa única y especial? O bien tienen los medios económicos para construir su propia casa, o bien se ven obligados a comprar el mismo piso que su vecino, aunque sus estilos de vida sean completamente diferentes.
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Sin embargo, cada vez es más difícil encontrar carpinteros o herreros que trabajen a mano, y los pocos que lo hacen suelen ser inasequibles para la mayoría de las personas. Las opciones estandarizadas son más económicas porque pueden ser replicadas infinitamente por máquinas, no por personas. Sin embargo, al utilizar materiales fácilmente disponibles en cualquier ferretería, donde se venden a precios similares los mismos productos que las promotoras utilizan para sus soluciones de gran consumo, podemos encontrar elementos capaces de transformar un espacio en algo único y original.
TUR House es un ejercicio de personalización total de una vivienda en un bloque de pisos estándar, ubicado en un barrio obrero, con un presupuesto asequible, aprovechando las oportunidades que el sector ya ofrece. No es una demostración de artesanía ni un manifiesto utópico por la vuelta al trabajo manual tradicional. Es más bien una apuesta por la originalidad, la singularidad y la personalización utilizando soluciones y materiales existentes en el mercado. Con productos estándar, dispuestos de forma inteligente y creativa, se pueden conseguir resultados verdaderamente únicos.
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La cerámica, por ejemplo, es un material espléndido muy arraigado en la cultura española desde la tradición árabe, e incluso antes. Al seleccionar piezas expresivas y evocadoras y colocarlas en lugares inesperados, transformamos un espacio en algo distinto y especial. En el salón de TUR House, un arrimadero de cerámica evoca la sensación de un patio al aire libre, mientras que el dormitorio, intencionadamente infantil, se extiende hacia el salón como una nube que se desplaza a través de un paisaje donde una lámpara se convierte en sol. La cocina de IKEA se personaliza con una encimera revestida de madera y las sencillas puertas blancas se realzan con paneles que reflejan las formas y la paleta de colores del resto de la casa. Todo ello se combina con muebles cuidadosamente seleccionados y de buen diseño a precios asequibles.