
La planta central de la vivienda de Nitsche Arquitetos se concibe como un espacio que complementa a los otros dos niveles, una gran sala diáfana, en la que permanecer, rodeada de paneles correderos de cristal que diluyen los límites entre el interior y el exterior.
La planta superior, sostenida por una estructura de cuatro pilares y dos grandes cerchas de acero, contiene cinco habitaciones con baño en suite. Las ventanas de estas habitaciones, que también se abren hacia la vegetación, cuentan con grandes paneles de cemento que dinamizan la fachada y se pueden cerrar para preservar la privacidad de los usuarios.
El proceso de obra estuvo condicionado por el limitado espacio de trabajo, por ello se optó por el uso de materiales prefabricados y un montaje in situ, reduciendo así la huella de carbono.

Casa Guarujá por Nitsche Arquitetos. Fotografía por André Scarpa.
Descripción del proyecto por Nitsche Arquitetos
La Casa Guarujá, situada en la ciudad de Guarujá, en el costa de São Paulo, está dentro de una urbanización cerrada que forma parte de una zona protegida del bosque atlántico original. Para preservar la riqueza de este bosque autóctono, la normativa local sólo permite urbanizar el 30% del terreno. El reto consistía en dar cabida a un programa que requería al menos 450 m² de espacio construido. Para lograrlo, el diseño se dividió en tres niveles.
La parcela de 1.310 m², con una pendiente constante del 14%, permitió incluir un sótano, cubierto por una losa de hormigón. Este espacio alberga el garaje, las zonas técnicas, la sauna y el spa, este último con vistas al bosque circundante. Además, hay un pequeño alojamiento para un par de empleados, así como una lavandería y un almacén.

Cuatro pilares de acero elevan el volumen de los dormitorios, sostenidos por dos «Pratt Trusses», creando un espacio libre entre la primera planta y el sótano. Las ventanas de los dormitorios se abren a las copas de los árboles, y la sombra creada por la estructura define la zona social. La planta central es un espacio casi totalmente abierto, protegido por paneles correderos de cristal, que permite contemplar el bosque desde todos los ángulos. Los paneles plegables de cemento garantizan la intimidad al tiempo que añaden dinamismo a la fachada. Las grandes puertas correderas de cristal permiten que los dormitorios y la cocina se fundan a la perfección con un espacio exterior cubierto, disolviendo los límites entre interior y exterior y creando una integración cohesiva de todos los espacios de este nivel.
El proceso de construcción consistió más en un ensamblaje de componentes que en una construcción tradicional in situ, lo que minimizó los residuos y aceleró el tiempo de construcción. Este enfoque fue especialmente eficaz dada la limitada área de trabajo, utilizando materiales industrializados en todo su potencial.