Aunque, no fue un encuentro conclusivo; su objetivo era dejar puertas abiertas y mostrar los diversos caminos que individual y colectivamente seguiremos recorriendo hacia la equidad, una cuestión que no es exclusiva de la arquitectura. Los temas abordados en las cuatro sesiones son parte de un proceso de ida y vuelta, y debe hacerse una constante revisión de las causas que nos han llevado a intensos debates sobre la poca visibilidad de la mujer en la arquitectura.
No obstante, las ponentes del cuarto encuentro, Belinda Tato (Ecosistema Urbano), Izaskun Chinchilla, Reyes Gallegos (La Ciudad Viva) y Eva Álvarez (Gómez+Álvarez Arquitectes), son cuatro mujeres que debido a su talento poseen gran visibilidad en el círculo de la arquitectura. Esta es la manifestación de que la mujer va paulatinamente abarcando territorio en la profesión mediante un trabajo de excelencia que no distingue género. Cada una presentó de manera breve una pequeña parte de su actividad profesional. Belinda Tato: el Plan Maestro para el Centro Histórico de Asunción. Izaskun Chinchilla: el proyecto "Organic Growth Crowdfunding" para Nueva York. Reyes Gallegos: su ambicioso y conocido proyecto editorial "La Ciudad Viva". Eva Álvarez: expuso lo que ella define como "labor + trabajo + acción" a través de proyectos como el Auditorio en Massanassa, Valencia, más una interesante combinación de su activo trabajo en temas de género.
"Estamos atravesando un momento crucial y estamos siendo parte de ello", me comenta Martha Thorne, por ello la importancia de una reseña, aunque modesta y sucinta, que dé cuenta de este punto de la historia. La acogida a la reseña del primer encuentro titulada “Feminidad, feminismo, feminización” fue una muestra de la especial sensibilidad al tema. Es un momento crucial, por supuesto. Es "tiempo" de mujeres. Entre comillas, porque la palabra tiene muchas vertientes, y porque sería pretencioso asegurarlo. Pero antes de explicarlo quisiera definir algunas cuestiones.
La cuestión ideológica. ¿Ser o no ser feminista?.-
Eva Álvarez empieza por citar a Lina Bo Bardi quien decía ser "anti-feminista y estalinista" : si viviésemos en la sociedad perfecta no habría por qué luchar. Esta auto definición por parte de Bo Bardi, debe comprenderse y estudiarse en todo su contexto; sin ello la interpretación de sus palabras podría ser equívoca o banal, pero eso lo dejamos para otra ocasión. La interesante intervención de Eva estuvo cargada de fascinantes referencias a arquitectas. "Me permito citarlas, porque en mis años de formación no citaban a ninguna". Con o sin etiquetas ideológicas, Lina Bo Bardi es una de las arquitectas más destacadas del siglo XX.
Escribir sobre feminismo es un tema comprometido, en especial porque el término es constantemente manoseado o malinterpretado. Su significado básico es desconocido por muchas y muchos. “No soy feminista” es uno de los comentarios más habituales a pesar de la aceptación y empatía con los temas tratados. Por ello, aunque parezca una obviedad, es necesario recordar la definición de feminismo: "Movimiento que exige para las mujeres iguales derechos que para los hombres". Como todo movimiento, posee sus particularidades y derivaciones según la tendencia ideológica de una persona o colectivo: conservadores o progresistas pueden ser feministas, incluidos sus respectivos extremos. El feminismo no es exclusividad de la mujer; un hombre idealmente debería también acogerse al concepto básico de la palabra. He aquí uno de los grandes mitos producto de la distorsión del término: ser feminista, no implica el agravio al hombre, implica equiparación de oportunidades. En el segundo encuentro de "Espacios para Arquitectas", la socióloga Amparo Lasén, comentaba: “la discriminación de una, va ligada a los privilegios del otro”. Esto significa que los problemas “no tendrán soluciones en las que todos ganen; una de las dos partes perderá sus privilegios”, afirma Amparo. El enfoque, puntualiza, radica en la solidaridad y la igualdad.
Distribución de estudiantes por sexo y nivel en la Escuela de Arquitectura de la UPM. Estudio realizado por Inés Sánchez de Madariaga.
Espacios para Arquitectas en números. Cortesía de Ariadna Cantis.
La cuestión historiográfica.-
Maite Muñoz, arquitecta presente en el segundo encuentro recordaba cómo el tema de la reivindicación de la mujer en la arquitectura es una cuestión que lleva muchos años. Cuando aún no se trataba en Europa, asistió al Congreso de Women in Architecture en St. Louis, EEUU, organizado por el American Institute of Architects en 1973. Fue en 1975 cuando el AIA dejó por escrito el estado de la mujer en la profesión . La situación no ha progresado como se esperaría en cuatro décadas, las estadísticas siguen siendo demoledoras, asegura Maite. Del mismo año data la encuesta que realizaría la revista Architectural Design "Women in Architecture", citada por Eva Álvarez. Cuarenta años después la misma encuesta ha sido lanzada para establecer una comparativa. También menciona el trabajo de un grupo de 15 arquitectas al que también pertenece: "Un día/una arquitecta" , pretende hacer honor (y justicia) presentando durante 365 las biografías de varias arquitectas a nivel mundial, permitiendo así visibilizar su labor a lo largo de la historia. Entre la diversidad de labores historiográficas sobre el tema tenemos también "Women Wikipedia Design" o "Women in Architecture". Esta es una mínima parte de un estallido de iniciativas similares alrededor del mundo.
Women in Architecture. Architectural Design 1975. Vol. XLV, No. 8.
Women in Architecture. Enero 2015. Portada de la revista Architect's Journal. Vol. 241. No. 3.
Cita de Gloria Steinem, periodista, escritora y activista de los derechos de la mujer. Cortesía de Eva Álvarez.
La cuestión del individuo y el colectivo.-
Ariadna Cantis recuerda al inicio del cuarto encuentro una de las causas de la falta de visibilidad de la mujer en la arquitectura es la insistencia en la figura del arquitecto como individuo, olvidando que la arquitectura es un trabajo que aúna esfuerzos de un grupo de profesionales. Al cierre, pregunto: si la negación del trabajo colectivo es uno de los problemas ¿cómo definir los nombres de las firmas de arquitectura? Las arquitectas también definen su estudio por su nombre, resaltando su carácter individual, y en el caso de parejas de arquitectos, lo habitual es que el apellido del hombre vaya primero. Las ponentes son muy diversas, así como sus respuestas. Belinda Tato, de Ecosistema Urbano, resalta el carácter colectivo de su estudio y cómo la consciencia de esta cualidad definió su nombre. Izaskun Chinchilla, cuyo estudio lleva su nombre, dice preguntarse habitualmente si ese debe ser el nombre de su firma, no obstante, cree que mientras forme parte del círculo en el que los lobbys de la arquitectura son de predominio masculino (vinculados adicionalmente al poder y al dinero), su posicionamiento debe partir de su nombre. Eva Álvarez, de Gómez + Álvarez, comenta que su firma tiene el nombre de sus hijos.
"Diseñando acciones para el cambio". Cortesía de Ariadna Cantis.
La cuestión del tiempo.-
"No creo en espacios para arquitectas... "espacio" es una palabra muy viciada en la escuela de arquitectura, prefiero hablar de tiempo". Estas fueron palabras de Atxu Amann en el segundo encuentro. El mito del arquitecto 24 horas es uno de los grandes problemas de la profesión, asunto que no distingue género pero que afecta primordialmente a la mujer. En todas las profesiones existen cuestiones subyacentes al tiempo, recordaba Inés Sánchez de Madariaga, pero en la arquitectura el mito antes mencionado hace más incisiva la situación. La desmitificación del arquitecto que come-duerme-sueña arquitectura es imprescindible. El conflicto no solo radica en la cuestión de la maternidad; aquello que Eva definía como labor + trabajo + acción implica una combinación entre lo remunerado y no remunerado, entre aquello que nos define como personas más allá de lo profesional, como los hobbies, la familia, el voluntariado, etc. Nos encontramos en una época en que si las mujeres deben conciliar el trabajo, los hombres deben conciliar la familia. Como decía Anupama Kundoo en el segundo encuentro: cambio personal, consciencia personal, no abusar de los horarios de la gente, no discriminar, ser uno mismo.
Martha Thorne cierra el encuentro alentando al público a formar redes, a celebrar la diversidad y el trabajo en equipo, a difundir investigaciones serias, al apoyo colectivo, a la búsqueda de alternativas a lo tradicional, a dar el golpe en la mesa el momento que se perciba la desigualdad, a buscar la excelencia, a mirar los valores donde otros no lo ven. "Es tiempo de mujeres".
NOTAS.-
i) ROSERO, Verónica. «Feminidad, Feminismo, Feminización. Espacios para Arquitectas.» METALOCUS. 24 de noviembre de 2014.
ii) Lina Bo Bardi asumió en 1943 la dirección de la revista Domus. Ingresó a la resistencia antifascista y se definía como estalinista y antifeminista. ODEBRETCH, Silvia. «Autencidad y carácter en la obra de Lina Bo Bardi (1914-1992).» Arquitectura y Urbanismo Vol. XXVII, nº No. 2-3 (2006): 23-32.
iii) Definición del diccionario de la Real Academia de la Lengua Española.
iv) EDELMAN, Judith, y et. al. «Status of Women in the Architectural Profession.» The American Institute of Architects. Febrero de 1975.
v) Women in Architecture. Encuesta de Architectural Design 1975 y 2015.
vi) "Un día/una arquitecta".
vii) "Women Wikipedia Design".