Fue en el año 2010, durante la Bienal comisariada por Kazuyo Sejima, cuando Rem Koolhaas hizo referencia a la Bienal de 1980 durante su exposición "Cronocaos", en la que estableció un profundo debate sobre la conservación vs. la demolición de la Arquitectura Moderna.
“Empecemos por el principio”,(01) decía Hans Ulrich Obrist a Rem Koolhaas, en su entrevista intentando indagar cuáles fueron los inicios, la primera epifanía de su interés por la conservación y su camino hacia "Cronocaos".La respuesta se direccionó hacia la Bienal de 1980 comisariada por Paolo Portoghesi, denominada “La presencia del pasado”, en consideración al tan mencionado en aquel entonces, movimiento posmoderno. Para Rem Koolhaas “La presencia del pasado”, fue la última vez que una Bienal prestó atención al tema de la conservación al abordar temas concernientes a preocupaciones que, según Charles Jencks, giraban en torno a un “lenguaje perdido de la arquitectura” (02) e iban en estrecha consonancia con el movimiento posmoderno y con una fuerte presencia de historicismo. Esta Bienal constaba de tres exposiciones, una de ellas dedicada a la generación más joven de aquel entonces, entre los que se encontraba Rem Koolhaas.
1. INTRODUCCIÓN. 2. TECHO. 3. PUERTA. 4. SUELO. Elements of Architecture. Pabellón Central, Bienal de Arquitectura de Venecia 2014. Fotografía © Francesco Galli. Cortesía la Biennale di Venezia.
5. ESCALERA. 6. ASCENSOR. 7. RAMPA. 8. FACHADA. Elements of Architecture. Pabellón Central, Bienal de Arquitectura de Venecia 2014. Fotografía © Francesco Galli. Cortesía la Biennale di Venezia.
"La primera Bienal de Arquitectura de Venecia en 1980 proporcionó un trampolín vital para el Posmodernismo, dotándolo de un escenario internacional. (...) sus fachadas de eminentes arquitectos de la época, es ahora una imagen seminal de la arquitectura del siglo XX. (...) la importancia que se da al pasado en el tema de la feria fue un punto de discusión entre los organizadores de la exposición."(03)
La exposición de 1980 no se libró de polémicas; había quienes lo consideraban un "pastiche", como Bruno Zevi quien, en abierto debate con Paolo Portoghesi, opinaba que la exposición sugería un difícil salto hacia la restauración de edificios, o Vittorio Gregotti que veía la exposición como "una orgía de columnas falsas".(04) También hubo algunas notables "ausencias". Kenneth Frampton, parte del comité organizador, renunció antes de la inauguración del evento, al creer en un modernismo revisionista, en contraposición al discurso central, que más que posmoderno, era anti-moderno. Otra ausencia fue la de Peter Eisenman, quien rechazó la invitación por consejo de Manfredo Tafuri.(05)
La figura de Peter Eisenman en la Bienal de 2014 ha sido más notable aún. El arquitecto desató la polémica al declarar que "Rem Koolhaas presenta la Bienal como la fine [final]: ‘El final de mi carrera, al final de mi hegemonía, el final de mi mitología, el fin de todo, el final de la arquitectura’. (...) Hace 50 años, sabíamos que el modernismo había muerto. Le Corbusier, Mies van der Rohe, Frank Lloyd Wright: todos muertos. No sabíamos lo que era el futuro pero sabíamos todo esto estaba muerto." (06)
Estas afirmaciones pueden relacionarse con la supuesta "muerte de la arquitectura moderna" que Charles Jencks anunciaría en la década de 1970 tras la caída de Pruitt-Igoe, un anuncio lleno de mitos y connotaciones más profundas y complejas, sacadas a la luz a principios de 1980 y retomadas en los últimos años en campañas de reivindicación de la Modernidad. De hecho, "Absorbiendo la Modernidad 1914-2014" una de las tres partes que componen "Fundamentos" conmemora 100 años Arquitectura Moderna, proponiendo un viaje hacia los orígenes de la globalización.
Ante la polémica generada por Peter Eisenman y su escepticismo sobre las intenciones de Rem Koolhaas del retorno a lo básico, el propio Charles Jencks comentó al respecto recientemente en The Architectural Review: “¿era una especie de fundamentalismo pragmático?” (...) “He encontrado un paralelo inverosímil con la propia obra de Eisenman especialmente en su consciente desestabilización del paradigma profesional.”(07) Para sugerir el final de la hegemonía de Rem Koolhaas, Peter Einsenman se ha valido de la propia postura crítica de Koolhaas: “El arquitecto estrella es una figura que no existe, un lugar común para referirse a los que ganan montañas de dinero y realizan todos los proyectos que desean. Un invento de los periodistas perezosos”.(08)
Ya lo había anticipado en "Cronocaos" al mostrar en uno de sus paneles que la última vez que un arquitecto apareció en la portada de la revista Time, fue en 1979 con Philip Johnson (a quien la Bienal de 1980 dedicó una exposición especial).
“El auge de la economía del mercado ha significado el final del arquitecto como una figura pública creíble. (...) Los ‘arquitectos estrella’ aceptaron un pacto faustiano en el que se hicieron más prominentes pero su papel menos significativo”.(09)
Esta es una de las principales diferencias entre la Bienal de 1980 y la de 2014: mientras Paolo Portoghesi tenía por objetivo que los arquitectos vuelvan a competir entre ellos, como en el siglo XVI y durante el período barroco, Rem Koolhaas prefirió enfocarse en la arquitectura y no en los arquitectos.
Primera Exposición Internacional de Arquitectura, "La Presencia del Pasado". De izquierda a derecha: Dibujo de Arata Isokazi; dibujo de Frank O. Gehry; El Codiere del Arsenale antes de su renovación; dibujo de Stanley Tigerman. Fuente.- Domus 610 Pp 9 -15, 1980.
Primera Exposición Internacional de Arquitectura, "La Presencia del Pasado". Dibujo de Robert A. Stern, M.; dibujo de Michael Graves; Dibujo de Franco y Laura Thermes Purini; Dibujo de Massimo Scolari. Fuente.- Domus 610 Pp 9 -15, 1980.
La Bienal de 1980 recordaba un pasado clásico, más lejano aunque mejor valorado, que el pasado que hoy se conmemora. Por ello, en 2014 era importante " romper todas las conexiones con la arquitectura contemporánea que, a pesar de las muchas manifestaciones impresionantes, no goza de buena salud, y centrarse en la evolución de la arquitectura mundial en los últimos 100 años"(10) que muestra el hecho de que la identidad nacional ha sido sacrificada por la modernidad. "Esta postura no es muy diferente a la del regionalismo de Frampton" (11) apunta una entrevista a Rem Koolhaas para The Architectural Review a propósito de “Fundamentos”, ante lo que Koolhaas establece las diferencias con la teoría de Frampton (quien, recordemos, renunció a la Bienal de 1980):
“Kenneth Frampton (...) miró el regionalismo como un antídoto para el desarrollo cosmopolita. Al hacerlo, se pervirtió la causa del regionalismo, porque de repente se movilizó el regionalismo como una causa privada que no se podía sostener. Sin embargo, la cuestión de la identidad nacional es un sistema abierto." Incluso países muy internacionalistas han optado por arquitecturas cuasi-vernáculas, sin embargo, comenta que la Arquitectura Moderna tanto como los tradicionalismos son parte una filosofía de estrategia publicitaria: "la gran mayoría de la llamada arquitectura moderna actual es en realidad una especie de efectismo de la Modernidad, y esto crea un espacio para que el tradicionalismo sea efectista también. (...) Veo esto más que desde una perspectiva arquitectónica como un problema social o antropológico.(12)
Estos cien años matizados según cada país por la presión de guerras, regímenes políticos muy diferentes, múltiples condiciones de desarrollo, movimientos arquitectónicos, talentos individuales, desarrollos tecnológicos, no sólo han marcado profundamente la arquitectura de nuestro tiempo, sino que están muy latentes
“Creo que la arquitectura está escrita como si se tratase de una disciplina muerta, pero creo que hay vida en la arquitectura",(13) comenta Rem Koolhaas. "La modernidad es un proceso doloroso, algunos países han estado obligados a modernizarse aceleradamente”. (14)
Rem Koolhaas ha roto el paradigma de las anteriores Bienales dedicadas a la celebración de lo contemporáneo, enfocándose en la historia para "reconstruir cómo la arquitectura se encuentra en su situación actual, y especular sobre el futuro".(15)
"La presencia del pasado”, "Cronocaos", "Fundamentos"; a cada bienal su controversia, o quizá la misma controversia, tejida de encuentros y desencuentros entre los "archistars" que aún sin querer serlo, son los protagonistas de las historias que han moldeado (o deformado) nuestras concepciones sobre la arquitectura de nuestro tiempo.
Primera Exposición Internacional de Arquitectura, "La Presencia del Pasado". Fachada de Thomas Gordon Smith; Fachada por Venturi, Rauch y Scott-Brown. Fuente.- Domus 610 Pp 12 -13, 1980.
NOTAS.-
1. KOOLHAAS, Rem, entrevista de Hans ULRICH OBRIST. «Interview with Rem Koolhaas.» Architecture Biennale - OMA Office for Metropolitan Architecture (NOW Interviews). La Biennale di Venezia Channel. Arsenale. 25 de agosto de 2010.
2. JENCKS, Charles. «The Presence of the Past.» Revista DOMUS, nº 610 (abril 1980). Pp. 9-15.
3. SZACKA, Léa-Catherine. «Historicism versus communication. The basic debate of the 1980 Biennale.» Architectural Design, nº 213 (Septiembre 2011): P. 98.
4. Ibídem (3): P. 105.
5. Op. cit. (3): P. 105.
6. CIUFFI, Valentina. «Peter Eisenman reta a Rem Koolhaas.» METALOCUS. 9 de junio de 2014.
7. JENCKS, Charles. «The Carnival of Thought: Charles Jencks on the Venice Biennale.» The Architectural Review. 25 de junio de 2014.
8. FERNÁNDEZ, Milena. «Rem Koolhaas contra las estrellas.» El País, enero 2014.
9. KOOLHAAS, Rem. «Cronocaos.» Bienal de Venecia. Exposición . Venecia, 2010.
10. BARBA, José Juan. «Rem Koolhaas: "reconstruir su actual situación y especular con el futuro".» METALOCUS. 11 de marzo de 2014.
11. MACKENZIE, Andrew. «Batik, Biennale and the death of the skycraper. Interview with Rem Koolhaas.» The Architectural Review. 24 de febrero de 2014.
12. Ibídem. (11).
13. Op. cit. (10).
14. KOOLHAAS, Rem. En SALAS, Roger. «La Bienal de Venecia se rebela contra los arquitectos estrella.» El País, 5 de junio 2014.
15. Op. cit. (10).