El diseño implementado, en las oficinas de 208m², confiere libertar de movimiento, viajando entre una diversidad de espacios y áreas al interior del lugar. Espacios que albergan y refuerzan el concepto de espacios de trabajo y vivienda.
Descripción del proyecto por BUREAU
En los últimos años, hemos aprendido sobre la movilidad. Desplazamientos y nomadismo profesional. Hemos estado alrededor, trabajando en todas partes, lastimándonos la espalda en sillas malas, casas, cafés, sitios de construcción, todo tipo de transportes.
Viajando en microescala en un perímetro europeo reducido, todavía bastante intensamente en movimiento. Se siente bien encontrar, por fin, un generoso campamento base de descanso en el corazón de nuestra bella Lisboa. Un espacio del pasado que nos permite ver más allá en el futuro, proyectarnos en otra cosa, algo que aún no somos y que podríamos llegar a ser. Un buen espacio es un espacio donde uno puede proyectarse, individual y colectivamente.
En los últimos meses, hemos aprendido sobre la inmovilidad, esta nueva palabra que ahora forma parte de nuestro vocabulario habitual: confinamiento. Estabilidad y adaptación doméstica, dentro de nuestros apartamentos. No hemos estado en otra parte que no sea en casa y en la pantalla, lastimándonos la espalda con infinitos zooms y tratando de hacer todo tipo de ejercicios en casa para seguir el ritmo.
Viajando en nanoescala de una habitación a otra. Se siente bien encontrar, de nuevo, nuestro generoso y hermoso lugar de descanso, la OFICINA. Una que nos permite mover nuestros cuerpos cómodamente, estar de nuevo alrededor, "viajar" dentro de una diversidad de espacios. Y proyectarnos entre esos dos "lieux" muy importantes que albergan y apoyan la mayoría de nuestras vidas cotidianas: espacios de trabajo y vivienda.
Hemos aprendido de uno y del otro y mantendremos las lecciones de ambos, ayudándonos a repensar las tipologías de los espacios cotidianos, aquellos tan importantes para moldear y condicionar nuestra experiencia. Habitaciones donde experimentamos nuestras vidas, con nuestros colegas y familias, y sobre todo, donde compartimos momentos que no necesitan "zoom": el nuevo exterior.
Esos momentos son los que hacen que el BUREAU sea un espacio, un lugar, un asentamiento, una habitación, un taller, una oficina, una sala de estar, una discoteca, un laboratorio de investigación, un comedor, un vestíbulo, un lugar donde nosotros intentemos descubrir cómo trabajar mejor.