La obra se localiza dentro de un edificio preexistente conservado casi en su totalidad, en el que se distribuyen un estudio de fotografía, salas de reuniones formales e informales, cabinas de videollamadas, sanitarios y un comedor para más de cien personas.
Uno de los aspectos claves para abordar el proyecto fue el de crear espacios versátiles que pudieran adaptarse en caso de futuras expansiones o refuncionalizaciones del edificio. Por ello, muchas de las áreas funcionales del edificio se dispusieron dentro de cajas de madera a modo de nichos, o con cerramientos visualmente permeables, que no solo pueden ir variando su función en el tiempo, sino también montarse y desmontarse sin mayores retos.
Pero sin lugar a dudas, el alma de la obra está en el núcleo de circulación, el aspecto más llamativo y característico de este nuevo espacio. Una escalera escultórica de hormigón que recorre los tres niveles, guiada por la luz al final del itinerario, que ingresa desde el lucernario tamizada por la propia estructura que lo sostiene.
Descripción del proyecto por Paulo Merlini
Los clientes ya eran propietarios del almacén adyacente al área de intervención donde se encuentran las empresas, pero con su crecimiento exponencial la necesidad de aumentar el espacio físico de la empresa se volvió perenne.
Los principales retos de esta intervención fueron la interconexión de los dos almacenes, para poder unir el espacio original y el nuevo espacio de la forma más fluida y natural posible, y la creación de dinámicas entre las dos empresas, que aunque distintas, trabajan sinérgicamente.
Uno de los temas más importantes en el diseño de la sede de una empresa es crear un espacio que exprese y esté en línea con la cultura corporativa.
En este caso, tanto E-goi como la cocina de Clavel, presentan un tipo de gestión bastante informal, aunque extremadamente profesional, y nos pedían un espacio que lo expresara, un espacio fluido, igualitario, heterogéneo y sin pretensiones.
En cuanto a funcionalidades el nuevo espacio debe garantizar mucha flexibilidad espacial, para responder al crecimiento de la empresa, incluir un nuevo estudio de fotografía, varias salas de reuniones, algunas formales, otras informales, cabinas de videollamadas y un espacio comedor que pueda albergar en al menos cien personas a la vez.
Con el fin de lograr todas las funcionalidades previstas, distribuimos una serie de cajas de madera, donde integramos todos los espacios cerrados, salas de reuniones, baños y cabinas de sala de video. Es la distribución de estas cajas a lo largo del espacio lo que define toda la dinámica espacial. Al distribuir estas funciones de forma heterogénea en todo el espacio, y al desajustar estos elementos en una especie de caos organizado, garantizamos la versatilidad espacial, y creamos una serie de recovecos que permiten varios tipos de apropiación, asignando a cada uno de ellos ellos una personalidad distinta. Garantizamos espacios amplios, donde la interacción entre compañeros de trabajo se da con gran naturalidad, y espacios más discretos, donde leer un libro, relajarse o incluso tener una reunión más informal.
Otra preocupación básica era garantizar que todos los espacios tuvieran mucha luz natural. Con la forma de la fachada definida por las restricciones legales, la diseñamos completamente acristalada. Junto a la fachada ubicamos el estudio fotográfico en el segundo piso y el restaurante en el tercero. De esta forma garantizamos una fuerte relación visual con la avenida principal, atribuyendo un efecto escénico al día a día de la empresa. El estudio fotográfico aprovecha la luz del norte, la mejor luz para el tipo de función que ofrece, ya que, reflejada por el cielo, ofrece una iluminación de bajo contraste, manteniéndose relativamente constante durante el día.
En el alzado trasero, hacia el oeste, abrimos una serie de vidrieras que refuerzan la presencia de luz natural durante todo el día.
Con el fin de garantizar una relación fluida y natural entre pisos, hemos diseñado una espiral de hormigón con un fuerte carácter escultórico, que interconecta los tres pisos y por su presencia caracteriza todo el espacio. En la parte superior un lucernario ilumina los tres pisos y deja al descubierto la estructura de barras que soportan la rampa, elegantemente propuesta por el ingeniero.