Cada cubo está horadado en su parte central, conformando un patio que iluminará las estancias interiores y alojará parte de los árboles. Como resultado, los vegetación se adentran en cada una de las piezas que forman la vivienda, creándose un diálogo continuo entre interior y exterior.
La materialidad de la vivienda se resuelve mediante vidrios opacos, que ayudan a desdibujar los límites y a generar un interesante juego de reflejos de los troncos de los árboles, cuyas visiones cambian según la hora del día y la época del año. Por otro lado, la frontera entre el interior y el exterior se diluye mediante grandes ventanales, patios ajardinados, y vidrios opacos en las fachadas, dando la sensación de estar dentro y fuera a la vez.
Casa entre pinos por Olalquiaga Arquitectos. Fotografía por Imagen Subliminal.
Casa entre pinos por Olalquiaga Arquitectos. Fotografía por Imagen Subliminal.
Descripción del proyecto por Olalquiaga Arquitectos
Una familia compuesta por un matrimonio con tres hijos nos encarga proyectar su futura casa en una parcela en las afueras de Madrid de más de 7.000 m² ocupada por un bosque de pinos y encinas.
Preservar los árboles de la parcela se convierte en premisa fundamental a la hora de afrontar el proyecto. El programa se desarrolla en una única planta debido a las preferencias por parte de la propiedad en este sentido, y tampoco se encontró justificación por razones de volumetría ni de posibles vistas que aconsejara crear una segunda planta. Esto hace que la vivienda llegue a ocupar el máximo de superficie permitido en la normativa, por lo que surge la necesidad de romper la edificación en tres volúmenes para poder preservar la magnífica arboleda existente.
Casa entre pinos por Olalquiaga Arquitectos. Fotografía por Imagen Subliminal.
Casa entre pinos por Olalquiaga Arquitectos. Fotografía por Imagen Subliminal.
Bajo estas premisas se desarrolla la casa en una sola planta en contacto permanente con el jardín de encinas y pinos a través de grandes ventanales y amplios porches. El amplio programa se resume en tres zonas: servicio, estancias de día, y estancias de noche, y se asigna cada una a un volumen exento que se asemeja a un cubo y que queda unido al resto mediante pasarelas acristaladas.
Dichos volúmenes se distribuyen en la zona de la parcela más cercana al acceso y más despejada de arbolado, respetando los retranqueos que impone la normativa. De esta manera el cubo que aloja el programa de servicio está orientado a poniente, mientras que los destinados a estancias de día y de noche quedan orientados a mediodía y saliente. La implantación de estos cubos en el bosque se ha realizado siguiendo un criterio de máximo respeto a la arboleda existente. Cada cubo está horadado en su parte central conformando un patio que iluminará las estancias interiores, alojando en ellos además parte de la arboleda.
Casa entre pinos por Olalquiaga Arquitectos. Fotografía por Imagen Subliminal.
Se presenta aquí una actuación de preservación del entorno natural, en la que una vivienda unifamiliar de gran superficie se fragmenta, se horada y se gira para mantener la arboleda existente. Como resultado de esta operación, los pinos y las encinas se adentran en cada una de las piezas que forman la vivienda, creándose un diálogo continuo entre ellos. La materialidad de la vivienda se resuelve mediante vidrios opacos que reflejan los troncos de los árboles, y cuyos reflejos cambian a lo largo del paso del tiempo y de las estaciones, como si de otro ser vivo de la parcela se tratara.
Con esta actuación se pretende mejorar la vida de las personas que habitan la casa, de manera que sientan que viven en un bosque, diluyendo la frontera entre el interior y el exterior mediante grandes ventanales, patios ajardinados, y vidrios opacos en las fachadas, creándose un juego de reflejos entre el interior y el exterior que produce la sensación de estar dentro y fuera de la casa a la vez.