
El proyecto de ASWA para la ciudad de Phitsanulok y compuesto por dos cubos principales, presenta una serie de aberturas y huecos triangulares y rectangulares dispuestos por las diferentes fachadas que se encargan además de permitir la entrada de luz, proyectan patrones de luz y sombra en el espacio y crean un ambiente dinámico que vincula el interior de la cafetería a su entorno.
La cafetería recibe a los clientes a través d un espacioso atrio de techos altos y caracterizado por sus tragaluces triangulares, al que suceden espacios más pequeños y oscuros que crean un contraste cautivador y cuyas aberturas cuadradas lo distinguen de la cafetería principal.
Realizado a partir de materiales como hormigón, madera y vidrio, elegidos meticulosamente, el proyecto fusiona ambientes más fríos y cálidos para dar lugar a un contraste de espacios sencillos que reflejen pureza y que inviten a la conexión.

DIFF Coffee Roasters por ASWA. Fotografía por Soopakorn Srisakul.
Descripción del proyecto por ASWA
Ubicado en la región norte de Tailandia, The Diff Coffee Roasters es un nuevo y vibrante establecimiento local diseñado para fomentar un sentido de comunidad. La sorprendente arquitectura de la cafetería consta de dos estructuras cúbicas (un cubo gris más grande y un cubo negro más pequeño) elegantemente conectadas por un paso elevado triangular visualmente cautivador. Este llamativo diseño abraza un árbol majestuoso e imponente con un dosel natural, que invita a los visitantes a relajarse en el área sombreada al aire libre.
Con una superficie de aproximadamente 800 metros cuadrados, el diseño de la cafetería está cuidadosamente diseñado para sumergir a los clientes en una atmósfera de comodidad y creatividad. El cubo gris más grande, ubicado de manera prominente en el frente, presenta una serie de aberturas y huecos triangulares que proyectan intrincados patrones de luz y sombra en todo el espacio, lo que mejora su ambiente dinámico. Los materiales (hormigón liso, madera cálida y vidrio expansivo) se eligen meticulosamente para celebrar la simplicidad y pureza del diseño.

Al entrar, los huéspedes son recibidos en un espacioso atrio, donde el techo alto y los tragaluces triangulares amplifican la sensación de amplitud. La imponente altura de nueve metros crea un contraste imponente con el sobrio exterior, envolviendo a los visitantes en una atmósfera sorprendente y estimulante. Mientras tanto, el cubo negro más pequeño, dedicado al bar, presenta un contraste cautivador con sus aberturas cuadradas y vacíos deliberados, ofreciendo un ambiente único que lo distingue de la cafetería principal. Juntos, estos elementos crean un espacio armonioso que invita a la conexión, la reflexión y el disfrute para todos los que ingresan.