Descripción del proyecto por Pía Mendaro
El proyecto necesitaba un espacio versátil donde poder trabajar con herramientas duras (soldadores, radiales, polvo, pintura.. ) y a su vez ser capaz de transformarseen pocas horas para convertirse en espacio público de exposición u oficina donde recibir clientes. Dada la planta reducida (de 6x7m), se decide dejar libre el mayor número de m3 posibles dedicados a este fin. Para ello, se condensa y esconde el resto del programa tras un muro blanco con aperturas que sirven al espacio libre público.
En planta baja: un gran almacén con una puerta de 3m de alto (para poder guardar casi cualquier cosa y esconder el desorden) que se cierra automáticamente mediante pesos y poleas, una puerta a un aseo, tres pequeñas aperturas para un proyector, almacenamiento y vistas, y una puerta (algo elevada) que da paso a la zona privada del proyecto.
La parte privada del espacio consiste en unas escaleras/cajoneras que suben a la vivienda del autónomo / artista residente.En la cual hay una ducha que es un cajón de hierro con una ventana de barco, y una pasarela; dormitorio que vuela sobre el espacio protagonista.
Bajo la pasarela, unas poleas dan servicio al espacio de trabajo y exposición: de ellas puede colgar una mesa de 4,80m donde trabajar y exponer, o cualquier otro objeto pesado (un columpio, por ejemplo).
La cocina está camuflada en el cobertizo del jardín trasero. Es un espacio poco acondicionado, con una larga barrapara dar aperitivos (fuegos y fregadero escondidos en los extremos). El cerramiento se abate abriéndose por completo al espacio exterior.
Actualmente este es el lugar de Barbecho, un espacio que rota entre talleres y residencias dedicado al diseño y producción de objetos útiles.