INAUGURACIÓN nuevo Pabellón Dufour por Dominique Perrault

Descripción del proyecto por Dominique Perrault

Con la reconstrucción del pabellón Dufour y el ala antigua se crean dos nuevos espacios públicos en el palacio de Versalles. Las antiguas oficinas administrativas han dado paso a una nueva área de recepción entre el Patio Real y el patio del Ptincipe, así como una gran escalera que conduce a los jardines. Los visitantes del palacio están invitados a seguir un bucle, al igual que en la mayoría de los grandes museos del mundo.

La sensación de "estrechez" ahora ha desaparecido: excavando una zanja bajo los edificios y la Cour des Princes, el nuevo desarrollo abre nuevos espacios en el nivel del suelo y crea volúmenes más grandes en el nivel del jardín.

La nueva zona de recepción, enteramente dedicada a mejorar la experiencia del visitante, se inicia en la Galerie des Lustres en la planta baja del ala antigua. Este espacio de techo alto, que se abre a la Cour Royale y la Cour des Princes, es la primera sala que los visitantes ven a medida que se abren camino en el palacio. Descubren un Versalles - envuelto en metal, elegante y moderno - se hace eco de la piedra y la madera de los edificios históricos.

La galería permite el acceso inmediato a la Cour Royale, donde comienza la visita. Antes de la salida, los visitantes siguen una trayectoria más baja en el nivel del jardín, debajo de la Cour des Princes, que los lleva a una serie de nuevas habitaciones, incluyendo una librería, baños, un guardarropa y un aseo.

La atracción principal en este nivel es la luz natural puesta en el nuevo espacio por un pasillo de cristal de color dorado. Actuando como un gran prisma, los paneles de cristal revelan las fachadas del ala antigua y la amplia escalera de mármol que conecta el interior hacia el exterior, y el castillo de sus jardines.

El bucle comienza y termina con la zona de recepción y la escalera de mármol junto con su prisma de oro: los dos nuevos espacios están conectados por lo tanto, como el cierre de un collar.

El pabellón Dufour y el ala antigua son revividos en sus niveles superiores, así como sus bases. En el segundo piso, un nuevo restaurante y habitaciones contiguas de té en oro y paneles de madera, convertido reciben a los visitantes. Por último, la tercera planta alberga ahora un nuevo auditorio, cubierto de revestimiento de madera como un casco de barco al revés y rodeado de habitaciones de época a cada lado.

Este nuevo desarrollo pone en evidencia las cualidades intrínsecas de la arquitectura clásica: con el pretexto de la quietud y la simetría, todo sigue siendo lo mismo y, sin embargo, todo cambia. El patrimonio histórico se conserva en su totalidad, al tiempo que permite nuevos usos contemporáneos que aún no se han inventado. El pabellón Dufour y el ala antigua del palacio son parte de un todo, y sin embargo, también existen como un área independiente, separado del resto del castillo. Al trabajar "bajo la piel" de los edificios, el nuevo desarrollo ofrece una solución funcional, sostenible y eficiente, preservando el diseño más grande del Palacio y el contorno de sus alas.

A lo largo de cada etapa en su larga historia, el castillo de Versalles ha actuado como un escaparate para los talentos modernos. Con el pabellón Dufour, el ala antigua y la escalera de Perrault, el castillo se mantiene fiel a su herencia.