La importancia de la geometría del proyecto toma partido en sus dimensiones y cualidades de forma que en lugar de direccionar ortogonalmente a las personas, dan libertad a desplazamientos más fluidos y quebradizos. Generando nuevas secuencias visuales y sensoriales entre las pasarelas.
Una serie de objetos interconectados de libres movimientos y predominancia de los materiales contemporáneos, hormigón y acero, que se combinan entre sí para dar un rigor estructural que se revista de madera para ser la materia intermedia entre la arquitectura y los vecinos del San José.
Descripción del proyecto por Vaumm + Taper
El encargo nace a partir de un concurso de ideas convocado por el ayuntamiento de Zumaia con la intención de mejorar la accesibilidad al barrio de San José. Este barrio, situado junto al casco histórico, se caracteriza por sus calles estrechas y sus grandes desniveles, adoleciendo además de espacios públicos de entidad.
La propuesta, ya en fase de concurso, propone solucionar la accesibilidad del barrio mediante un ascensor urbano que, utilizando el núcleo de la torre existente en el edificio de viviendas, conecta hasta 5 niveles diferentes y, al mismo tiempo, aprovecha los nuevos flujos de circulación para reconfigurar el espacio público en torno a ellos.
Para ello se proyectan dos pasarelas. La superior, de algo más de 28 metros, conecta el ascensor con las inmediaciones de la residencia de San Juan. A fin de garantizar la accesibilidad hasta el centro de mayores, esta se prolonga con otro tramo de unos 27 metro de longitud, que discurriendo sobre la ladera y con 4 metros de anchura, hace las veces de terraza y zona exterior de pausa.
En el ámbito inferior encontramos otra pasarela, de menor tamaño, en torno a la cual se genera una plaza que sirve de pequeño pulmón al barrio y que acoge bajo ella unas plazas de aparcamiento cubiertas.
Teniendo en cuenta la magnitud de la intervención, se cuida la implantación geométrica de la propuesta con el objetivo de causar el menor impacto posible. Para ello, en el ámbito inferior se trabaja con el pliegue de las losas, generando un plaza a dos altura que se aleja de las viviendas y posibilita un mejor soleamiento.
En el caso de la pasarela superior, la pieza con mayor impacto, se opta por un sistema estructural que permita salvar la luz de la manera más ligera posible. Su geometría quebrada contribuye igualmente a reducir su impacto y, además, permite generar nuevas visuales. Nuevamente esta pasarela no trata exclusivamente de conectar dos puntos, sino que con su sección variable, más ancha en tramo central, pretende asomarse sobre los tejados de las viviendas apareciendo como un mirador hacia el núcleo urbano y hacia el mar.
En cuanto a los acabados se ha utilizado una paleta reducida de materiales que, por otra parte, están estrechamente ligados a la función que desempeñan. Así, predomina el uso del hormigón -ámbito inferior y en contacto con el terreno-, Del acero -en pasarelas y herrerías- y de la madera-como material de revestimiento y de mediación con el usuario.