Los espacios públicos se yuxtaponen linealmente generando una «enfilade», que se amplifica gracias a la incorporación de espejos de gran dimensión en las puertas correderas. Los espacios dedicados a los dormitorios se conectan a través de una serie de profundos umbrales marcados por un fuerte contraste material, de textura y nivel cromático.
Los principales acabados de la vivienda giran en torno a una paleta de colores blancos en paredes y techos, mármol de macael para los suelos y laca blanca para los armarios empotrados. Los umbrales se resaltan mediante el uso de paneles de madera de roble con acabado natural en suelos, jambas y dinteles.
La isla revestida chapa de acero inoxidable cepillado se añade a la cocina para añadir profundidad a la enfilade de los espacios públicos.
Vivienda en Prosperidad por PRÁCTICA. Fotografía por Imagen Subliminal.
Descripción del proyecto por PRÁCTICA
Este proyecto consiste en la rehabilitación de una pequeña vivienda en Prosperidad, Madrid, España, de 107 m² de superficie. El denso programa y el limitado acceso a luz natural dieron lugar a una serie de soluciones de diseño centradas en los conceptos de la enfilade, el umbral y muro habitado.
En primer lugar, el apartamento se divide en dos zonas. Una de ellas alberga todos los espacios públicos, como el salón, la cocina-comedor y un despacho. La otra zona contiene los espacios más privados, incluidos tres dormitorios y dos cuartos de baño completos. Siendo la superficie tan reducida en contraste con el número de habitaciones necesarias, toda la distribución está estructurada sin pasillos, lo que optimiza los metros cuadrados disponibles. Todas las estancias públicas están yuxtapuestas linealmente en forma de enfilade. Están conectadas por una serie de aberturas enfrentadas, que añaden profundidad a los espacios, multiplican el impacto de la luz natural y amplían las vistas interiores. Estas aberturas pueden cerrarse mediante una serie de grandes puertas correderas con superficies de espejo. Los espejos reflejan el espacio interior, manteniendo o incluso ampliando la profundidad de la enfilade cuando están parcial o totalmente cerrados. Cuando se cierran dos pares consecutivos de puertas, sus superficies reflectantes crean un efecto visual de enfilade infinito.
Vivienda en Prosperidad por PRÁCTICA. Fotografía por Imagen Subliminal.
Las distintas habitaciones de la vivienda están conectadas a través de una serie de profundos umbrales. Estos umbrales enmarcan las vistas interiores de la residencia y conectan todos sus espacios, al tiempo que establecen un claro límite físico entre las unidades continuas. Están marcados por un fuerte contraste material, textural y cromático. Por un lado, los principales acabados de la vivienda giran en torno a una paleta de colores blancos, incluyendo pintura plástica blanca para paredes y techos, mármol de macael para los suelos y laca blanca para los armarios empotrados. Por otro lado, los umbrales se resaltan mediante el uso de paneles de madera de roble con acabado natural en suelos, jambas y dinteles. Las guías y los bordes de las puertas correderas también están revestidos de madera de roble, de modo que quedan totalmente ocultos cuando están completamente abiertas. Dos de estos umbrales, vinculados a los tres dormitorios, son más profundos que el resto, conformando las zonas de vestidores y los accesos a los cuartos de baño, alojados tras puertas ocultas.
Los distintos espacios están divididos por una serie de gruesos tabiques en forma de muros habitables expandidos. Todos los tabiques tienen un grosor de 70 cm y contienen numerosos armarios, electrodomésticos y roperos. Estos muros expandidos proporcionan todo el espacio de almacenamiento necesario para la Vivienda en Prosperidad, al tiempo que maximizan la insonorización entre habitaciones y la sectorización climática entre espacios.
Vivienda en Prosperidad por PRÁCTICA. Fotografía por Imagen Subliminal.
Por último, una isla de cocina revestida en chapa de acero inoxidable cepillado, se alza en el centro de la enfilade de espacios públicos. El acabado en acero de la isla le añade reflejos velados, haciendo que se funda con su entorno y acentuando la profundidad de la enfilade. Los dos cuartos de baño y el lavadero están completamente revestidos de microcemento gris claro, que recorre el suelo, las paredes, el techo, las duchas, los lavabos e incluso los armarios. Las puertas de estos últimos están acabadas en espejo y retroiluminadas con tiras de LED ocultas.