Un oasis de unos 600 metros cuadrados con una vista privilegiada sobre Lisboa, cuyo interior contiene espacios luminosos flanqueados por patios, y definidos por dos escaleras a cada lado de este espacio central, que funcionan como piezas escultóricas sueltas, ayudando a guiar a los habitantes entre las planta baja y las dos estancias donde se ubican los dormitorios.
Estructuralmente, la parte más desafiante de la casa no fue tener que construirla sobre pilotes debido a su proximidad al río, sino el cuidadoso proceso de construcción para crear la piscina en el techo, que recordaba al arquitecto la fisonomía de una ballena azul.
«Queríamos asegurarnos de que las personas que viven aquí tuvieran la sensación de que podían moverse libremente de diferentes maneras. Una vez que llegas a la galería principal, el espacio se distribuye desde de un lado las habitaciones para amigos e invitados, y del otro lado, la secuencia espacial para los padres o dueños de la casa, mientras que al fondo se encuentran oficinas, dormitorios y vestidores, en el fondo este espacio reúne todo y a toda la familia; cualquiera que se mude a la casa siempre está ahí para participar en este espacio».
Casa en Barreiro por Aires Mateus. Fotografía por Fernando Guerra.
Casa en Barreiro por Aires Mateus. Fotografía por Fernando Guerra.
Descripción del proyecto por Aires Mateus
El proyecto está formado por dos antiguas naves unificadas en un único espacio. En el exterior se mantiene el aspecto ruinoso y las huellas del pasado; mientras que en el interior, las paredes crean un espacio blanco y luminoso: la casa. Dos jardines configuran la relación entre el interior y el exterior. En el interior de doble altura, un espacio central está habitado por dos bloques de escaleras. Existe un volumen arquetípico dentro del espacio bajo un techo formado por el negativo de la piscina de la azotea. La casa se define dentro de este espacio por la relación entre el volumen de la piscina y los muros existentes.
Se establecieron dos tipos de intervención: conservación y recuperación -en la que se propone una restauración general del edificio- y una nueva intervención -adaptación del edificio a un nuevo programa-.
Se propuso una reevaluación de la escala original, resultante del derribo del muro interior que dividía las dos naves. Esta fusión proporciona un uso contemporáneo del vacío de la estructura; así, se preserva el vacío entre una fachada nueva y una preexistente; organizando una brecha descubierta entre ellos.
En el espacio principal se desarrollan diferentes áreas con disímiles escalas y características en función de su uso. El área central se ve ampliada por el techo de doble altura y está marcada por el contraste entre el negativo de la piscina con el arquetipo suelto. La circulación interior se resuelve mediante dos escaleras que nos conducen a la galería del piso superior, hacia las zonas privadas.
Casa en Barreiro por Aires Mateus. Fotografía por Fernando Guerra.
Casa en Barreiro por Aires Mateus. Fotografía por Fernando Guerra.
En armonía con el interior libre, los únicos componentes del espacio exterior son la depresión que perfila la piscina y el muro protector redondeado que pretende organizar un momento más íntimo con total apertura al río y a la ciudad de Lisboa.
La construcción prioriza la conservación de las técnicas originales. Los métodos contemporáneos mejoran la calidad, la seguridad y la comodidad. Los muros exteriores se corrigen ligeramente con mortero de cal. En el interior, las paredes están reforzadas con losas de hormigón pintadas de blanco. La nueva estructura utiliza hormigón armado, consolidando los muros existentes.
Las nuevas paredes utilizan "Cappotto" sobre ladrillo u hormigón, asegurando superficies lisas; mientras que las paredes interiores son de ladrillo perforado, enlucidas y pintadas de blanco. El acristalamiento es de aluminio anodizado en color natural con doble cristal de altas prestaciones, y las puertas de garaje y entrada son de chapa lacada en blanco.
Los suelos interiores son de fibrocemento flexible en color blanco; mientras que el exterior, terraza y piscina, son acabados hidrófugos de poliurea blanca. Las barandillas son varillas metálicas lacadas en blanco empotradas en el suelo.