El proyecto de Vaillo+Irigaray Architects resuelve el porche orientado hacia la plaza con un pórtico de hormigón introduciendo una escala «institucional» al proyecto. Las fachadas tienen terrazas corridas en toda su longitud, camuflando calderas o los diferentes elementos que puedan afectar a la imagen exterior. Esto se consigue gracias a una a la estructura metálica exterior.
El material utilizado es chapa metálica perfilada, con el que se intenta simplificar y dar unidad al proyecto debido a la compleja normativa a la que hacen frente. La contundencia de la volumetría del edificio es el aspecto que más resalta, contando con diferentes longitudes para los bloques. El color bronce da una estética diferente según las diferentes formas de incidencia de la luz exterior.
«75 social housing·VPO Arrosadía» por Vaillo+Irigaray Architects. Fotografía por Rubén Perez Bescos.
«75 social housing·VPO Arrosadía» por Vaillo+Irigaray Architects. Fotografía por Rubén Perez Bescos.
Descripción del proyecto por Vaillo+Irigaray Architects
El proyecto se ubica en un barrio de reciente creación en el extrarradio de Pamplona.
La parcela conforma una plaza con las edificaciones adyacentes. La normativa obliga a dos pastillas longitudinales de diferentes alturas: 2B+7+A hacia la calle, y 2B+4+A hacia la plaza. La normativa también impone hacia la plaza un porche de doble altura, que el proyecto resuelve mediante un pórtico de hormigón introduciendo una escala “institucional” al proyecto.
El conjunto residencial se resuelve con escasos medios económicos dado que contiene viviendas sociales -Protección Oficial-. La ordenación volumétrica se divide en 2 bloques longitudinales de diferentes alturas, dejando un patio central interior corrido donde se ubican las comunicaciones verticales y las conexiones a las viviendas.
Las fachadas de las viviendas se resuelven mediante terrazas corridas en toda su longitud. Estos elementos exteriores corridos resuelven los tendederos, calderas, etc. mediante unos gestos mínimos que los camuflan dotando de cierta vibración al conjunto.
El proyecto intenta simplificar al máximo la complejidad normativa mediante la utilización de, prácticamente, un único material, como es la chapa metálica perfilada. Enfatizando, por tanto, la volumetría resultante a modo de volúmenes estruídos longitudinales. El color bronce provoca, frente a la rotundidad de la volumetría, una imagen cambiante que reacciona de diferentes modos según la soleamiento y al nubosidad, muy cambiante en estas latitudes.