Descripción del proyecto por Ruiz Barbarin Arquitectos
Este aspecto es el que movió a la propiedad de los dos edificios a plantear la ampliación de sus oficinas con las plantas sótano -1, baja (con entreplanta) y planta primera del edificio Nº 6, solicitando la preceptiva Licencia de Obras y Actividad que ampare las obras de conexión de los dos edificios a nivel de planta baja (y entreplanta), así como la modificación de las fachadas de ambos inmuebles, con vistas a generar una imagen exterior de conjunto entre los dos edificios actuales, dado que ninguno está protegido, y dado que la propiedad busca una imagen representativa de la firma a la que representa, el Banco Caminos.
Con la vinculación de las plantas bajas de los dos edificios se consigue aumentar la superficie de la sucursal bancaria, localizada en esa planta baja, la cual tendría su acceso principal a través de la fachada del Nº 8, actual acceso al Banco. A su vez, se promovió un conjunto de seis viviendas, las cuales se desarrollan en las plantas segunda a séptima del edificio, es decir, cada una de ellas ocuparía una planta del inmueble actual, debido a la reducida dimensión en planta del mismo (180m² construidos por vivienda) y a la tipología de vivienda por la que se opta, en su totalidad viviendas de alto standing.
El alcance que persigue la intervención en el inmueble Nº 6 de la calle Almagro, aun no siendo muy antiguo (año 1964), es renovar el edificio para un nuevo periodo de vida útil, posibilitar su uso como inmueble de oficinas en plantas inferiores y residencial en plantas superiores, manteniendo su volumetría y carácter original pero adecuándolo a las necesidades funcionales de los nuevos usuarios, dotándolo de los servicios y condiciones de seguridad e higiene que posibilite la perfecta habitabilidad del mismo.
Las obras planteadas en este documento van encaminadas a dar respuesta a los condicionantes planteados, así como a la recuperación para una óptima utilización y puesta en valor de un inmueble emblemático dentro del área urbana en la que se encuentra ubicado.
La intervención global en cada unidad funcional que se plantea se puede entender subdividida en dos partes:
- Homogeneización espacial dentro de cada ámbito funcional, adaptándose al nuevo uso, buscando la intercomunicación entre todas las partes del inmueble buscando una mejor respuesta tanto funcional, en el desarrollo normal de la actividad, como de seguridad en caso de emergencias. Se busca también, claro está, una mayor calidad arquitectónica de los espacios proyectados, espacios de trabajo más amables con los empleados y más agradables para los usuarios esporádicos, en el caso de las oficinas.
- Acondicionar el edificio para cumplir los requisitos de confort actuales así como a las nuevas necesidades normativas en cuanto a seguridad e higiene se refiere.
Fachada principal conjunta de los edificios Nº 6 y Nº 8 de la calle Almagro
Una de las premisas, por parte de la Propiedad, a la hora de acometer las obras de rehabilitación del edificio Nº 6, fue la creación conjunta de una única fachada que incorporara las dos antiguas fachadas de los edificios originales (Nº 6 y Nº 8).
En su origen, los dos edificios presentaban alturas de cornisa y coronación parecidas, así como niveles de forjados similares y retranqueos a la fachada exterior idénticos, por lo que el planteamiento de una única piel que recoja ambos edificios no debía resultar problemática a nivel de huecos de fachada y alturas de la misma.
Con la nueva propuesta de fachada para los dos edificios, se pretende que la nueva propuesta dialogue con el entorno actual del edificio, muy dispar. La propuesta de composición planteada para esta nueva fachada plantea una reinterpretación de una fachada clásica de Madrid, con balcones, pero jugando con el abocinamiento de los nuevos huecos de piedra y las dobles escalas de estos mismos huecos en su parte superior. Dos grandes marquesinas enmarcan perimetralmente el conjunto de la fachada en sus plantas superiores. La planta baja, pétrea, tectónica, se fija al suelo en un intento de anclarse a la realidad.