Los edificios se construyen sobre una estructura de hormigón armado en los sótanos creciendo a partir de la cota cero con una estructura de madera, material que se convierte en una constante en los acabados y en las fachadas. El edificio se remata con un voladizo de madera CLT que ayuda a proteger las superficies de abeto de las fachadas del duro clima nórdico.
Viviendas Solberg Hage por R21 arkitekter. Fotografía por Ruben Ratkusic.
Descripción del proyecto por R21 arkitekter
El proyecto se sitúa en las afueras del pueblo de Ås, a lo largo de una carretera suburbana con tráfico regular. El entorno se caracteriza por viviendas unifamiliares dispersas y pequeñas, sin una organización definida, junto con áreas sin desarrollar y comercios aislados al otro lado de la carretera. Esta disposición suburbana, carente de mobiliario urbano y vegetación organizada, presenta una estructura poco definida y de una densidad baja. La reciente normativa busca mejorar esta situación, impulsando una reconfiguración del entorno hacia una mayor densificación y cohesión urbana.
El encargo planta el proyecto y la construcción de 52 unidades residenciales distribuidas en 4 edificaciones de perímetro libre, dispuestas linealmente a lo largo del eje viario principal. La planta tipo se erige como un ejercicio de simetría rotacional en torno a un núcleo vertical desplazado, albergando cuatro departamentos en esquina. Estratégicamente, los balcones, concebidos como galerías, se sitúan en las esquinas de los volúmenes, atenuando así los ruidos provenientes de la carretera adyacente. Se pretende reducir la escala volumétrica de los edificios retranqueando los testeros hasta la siguiente línea de fachada. Dicha operación da lugar a grandes terrazas que enriquecen la habitabilidad de los niveles superiores.
Desde el comienzo del encargo se planteó el desafío de construir los edificios completamente en madera exceptuando el sótano. Se optó por un sistema portante de madera CLT, abarcando losas y tabiques, e incluso los núcleos verticales. En las fachadas, la utilización exclusiva de perfiles de madera de abeto tratada con barniz al agua en diversos formatos, vertical y horizontal, confiere un carácter cálido y ordenado al conjunto edificado. El remate del edificio se distingue por un voladizo de madera CLT, diseñado para proteger las superficies de abeto de las inclemencias del clima nórdico. Aunque las regulaciones locales impiden la exposición de los paneles de madera en el interior de las viviendas, estos quedan expuestos en áreas comunes, comunicando así al usuario la esencia constructiva del edificio.