El diseño de Junya Ishigami para el pabellón Serpentine 2019 se inspira en los techos, la característica arquitectónica más utilizada en todo el mundo. El diseño se realiza organizando pizarras para crear un solo techo de dosel que parece emerger del suelo del parque circundante. En el interior, el interior del pabellón es un espacio cerrado similar a una cueva, un refugio para la contemplación. Para Ishigami, el pabellón articula su filosofía de "espacio libre" en la que busca la armonía entre las estructuras hechas por el hombre y aquellas que ya existen en la naturaleza.
Ishigami es el decimonoveno arquitecto en diseñar un pabellón en Serpentine, siguiendo los proyectos de Frida Escobedo (2018), Francis Kere (2017), Bjarke Ingels (2016) y SelgasCano (2015). El pabellón se dio a conocer hoy temprano, pero la noticia se ha visto opacada por el anuncio de que la CEO de Serpentine, Yana Peel, renunció en medio de una disputa por software espía.