Herzog & de Meuron terminan la rehabilitación y ampliación del neobarroco Stadtcasino Basel

Descripción del proyecto por Herzog & de Meuron

La ampliación de Herzog & de Meuron del Stadtcasino Basel del siglo XIX se acaba de terminar. Comenzando con un estudio urbano en 2012, la visión del proyecto se basa en estrategias interconectadas que incluyen restauración, preservación y nueva construcción. El resultado no es simplemente un edificio, sino la creación de un nuevo espacio público en el contexto histórico de la Barfüsserplatz.

El componente central del proyecto, el Stehlin Musiksaal de 1876, es una de las salas de conciertos más antiguas e importantes de Europa, conocida internacionalmente por su acústica excepcional y su experiencia auditiva refinada. Originalmente concebido como un palacio, se desacopla del Casino de 1939 y se trata como un edificio autónomo. Esta separación restablece un carril entre los edificios, formando una conexión directa entre Steinenberg y Barfüsserplatz.

La nueva ampliación, que alberga vestíbulos, bares, vestuarios e instalaciones de servicio, emerge de la antigua como si siempre hubiera estado allí; a primera vista parece estar en la misma tradición arquitectónica neobarroca, sin embargo, la sólida mampostería de la fachada histórica ha sido reconstruida a la escala original con tecnologías digitales en un revestimiento contemporáneo de madera.

El Stadtcasino ahora está completo, reuniendo elementos neobarrocos y contemporáneos para crear un nuevo tipo de arquitectura en esta ubicación clave en el centro de Basilea, listo para albergar conciertos públicos nuevamente en los próximos meses.

El ascenso de la milla cultural en el siglo XIX y su desaparición urbana en el siglo XX
En el transcurso del siglo XIX, se demolieron las fortificaciones de la ciudad y los edificios adyacentes de los antiguos Conventos de Barfüsser y St. Magdalen, dejando espacio para lo que hoy llamaríamos una Milla Cultural a lo largo de la periferia sur del casco antiguo de Basilea. Estos desarrollos reflejan la visión urbana y arquitectónica de aquellos tiempos.

El Casino (1826) y el Teatro Blömlein (1831), basado en los planes de Melchior Berri, fueron seguidos en la segunda mitad del siglo XIX por varios edificios importantes diseñados en estilo neobarroco por Johann Jakob Stehlin. Situado entre Barfüsserplatz y St. Alban-Graben, incluyeron el Kunsthalle (1872), el Stadttheater (1875), el Musiksaal (1876), el Steinenschulhaus (1877) y el Skulpturenhalle (1887).

En 1939, el viejo casino fue demolido para dar paso a uno nuevo, diseñado por los arquitectos Kehlstadt & Brodtbeck, y cuando el antiguo Stadttheater fue derribado en 1975, la brecha resultante creó una plaza para el nuevo Teatro, anunciando así definitivamente el final de la antigua Milla Cultural. De los edificios originales, solo han sobrevivido Kunsthalle, Skulpturenhalle y Musiksaal.

Proyecto de 2007, derrotado en un plebiscito
Un nuevo proyecto de construcción diseñado para reemplazar el Casino de 1939 fue derrotado en un plebiscito de 2007. El proyecto de Zaha Hadid había ganado el primer premio en un concurso de arquitectura, pero fue rechazado por la gente, principalmente debido a su gran concentración. Unos años más tarde, en 2012, se nos encargó realizar un estudio urbano para determinar cómo se podía reorganizar el espacio limitado y cualitativamente inadecuado para acomodar instalaciones auxiliares para el histórico Musiksaal de 1876. La primera fase de estos esfuerzos se centró en el Musiksaal, Una de las salas de conciertos más antiguas e importantes de Europa. Es la sala de conciertos residente de la Orquesta Sinfónica de Basilea y también alberga conciertos de la renombrada Orquesta de Cámara de Basilea y Basilea Sinfonietta. Con capacidad para 1400 personas, es aclamado internacionalmente por su acústica excepcional. Cuando se construyó la sala en 1876, las instalaciones de servicio se vieron severamente restringidas debido a limitaciones presupuestarias. Este problema se resolvió parcialmente en 1939 al agregar extensiones a la estructura. Dados estos profundos cambios en los últimos 80 años, es imposible que las instalaciones anticuadas y estrechas satisfagan las necesidades de una sala de conciertos contemporánea. La supervivencia de este lugar invaluable para la música requería una renovación estructural urgente y reparaciones, así como una expansión indispensable para acomodar un espacioso lobby, instalaciones detrás del escenario para artistas y otros servicios técnicos.

La ampliación
Exploramos una serie de posibilidades y variaciones para generar más espacio para albergar las instalaciones adicionales requeridas para el Musiksaal. Nos centramos en el área entre el Musiksaal y la Barfüsserkirche, donde se habían construido los claustros en la Edad Media. En consecuencia, el área había sido despejada para modificaciones arquitectónicas por el Departamento de Preservación Histórica. Inicialmente, propusimos extensiones del edificio entre la Barfüsserkirche y el Musiksaal en analogía con los antiguos claustros, pero pronto descartamos la idea por motivos urbanos, arquitectónicos y operativos. El Stehlin Musiksaal fue concebido brillantemente como un palazzo y todos los intentos de agregar al edificio parecían un mosaico ridículo. Al igual que en el anexo de 1939, la extensión que da a la iglesia habría sido percibida como detrás del edificio y, por lo tanto, inferior a la fachada que da a Steinenberg.

La única solución viable era tratar el Musiksaal como un edificio autónomo, desacoplado del Casino de 1939.

Un palacio
Como un edificio independiente, el Musiksaal obviamente tenía que ser más grande que el edificio central existente de 1876. Tendría que salir del antiguo edificio como si siempre hubiera estado allí. Es por eso que fue tan importante diseñar la adición, acomodar vestíbulos, instalaciones de servicio, salas de ensayo y vestuarios, de modo que, al menos a primera vista, parezca estar en la misma tradición arquitectónica neobarroca. Nuestro diseño se basa en la fachada posterior del edificio de Stehlin, que durante mucho tiempo estuvo oculto en gran parte detrás de las antiguas extensiones. Con tecnologías digitales escaneamos la fachada y la reconstruimos a escala original.

La sólida mampostería de la fachada histórica ha dado paso a una fachada de hormigón armado aislado con revestimiento posterior ventilado de acuerdo con la tecnología de construcción contemporánea y el control del clima. Decidimos que la madera sería el revestimiento más adecuado y modificamos la geometría de la fachada original solo ligeramente para cumplir con los requisitos estructurales de ese material.

Cuando se construyó el Musiksaal en el siglo XIX, ciertos elementos estaban hechos de madera y luego pintados para que combinaran con el diseño del conjunto, como la cornisa aparentemente masiva, que había sido pintada para parecerse a la piedra de la fachada. Lo mismo se aplica a las columnas en el interior, que habían sido construidas en madera o yeso debido a la acústica. Ellos también fueron pintados para parecer piedra.

El carril
Separar las operaciones de la sala de conciertos y el Stadtcasino también significó demoler la antigua área de entrada con su escalera. Esto permitió una conexión directa entre Steinenberg y Barfüsserplatz, donde los carruajes solían detenerse, antes de la demolición del edificio Berri en 1938 y la construcción del nuevo Stadtcasino en 1939. Por lo tanto, el Musiksaal ahora está orientado hacia el antiguo Steinenberg Milla Cultural y Barfüsserplatz; Es una presencia clara en Barfüsserplatz, que comparte el espacio en pie de igualdad con la imponente Barfüsserkirche. El área entre la Iglesia y el Musiksaal, una vez simplemente percibida como una especie de patio trasero, se ha convertido en un nuevo espacio público.

Esta recuperación volumétrica del espacio urbano llama la atención sobre otras debilidades. El Casino de 1939 siempre ha dado la espalda a la plaza, con una fachada trasera que parece un edificio de apartamentos. Además, el diseño de 1980 de Barfüsserplatz incluye una parada de tranvía que obstruye la plaza. La situación, sin duda, necesita más consideración, especialmente porque Barfüsserplatz es uno de los espacios públicos más importantes de Basilea.

El Stehlin Musiksaal
El Musiksaal se ha modificado significativamente varias veces desde que se construyó en 1876, primero en 1905 junto con el Salón Hans Huber construido por Fritz Stehlin, momento en el que se construyó un órgano en el pasillo, la decoración de estuco aplicada al techo, los bustos de músicos colocados contra las paredes, y el esquema de color renovado. La segunda reforma importante se produjo en 1939, cuando los arquitectos Kehlstadt y Brodtbeck derribaron el antiguo Casino para dejar espacio para el edificio actual. Un aumento significativo en la inclinación del balcón trasero proporcionó acceso desde el balcón al edificio recién construido en el medio. Otros ajustes en los años siguientes incluyen cerrar la claraboya y las ventanas, reemplazar los asientos históricos, rediseñar los candelabros históricos, reemplazar el parquet original e introducir un esquema de color completamente nuevo.

La restauración actual de la sala de conciertos se ha llevado a cabo en estrecha colaboración con el Departamento Cantonal del Patrimonio Cultural. El objetivo de restaurar el edificio a su estado original en el momento en que se renovó por primera vez en 1905 iba de la mano con la máxima prioridad de preservar las propiedades acústicas de la sala. Abrimos la claraboya y las ventanas nuevamente, recreamos los asientos originales, redujimos la inclinación del balcón, colocamos un duplicado del piso de parquet original y restauramos la combinación de colores de 1905.

Los foyers
La ampliación del volumen general directamente contiguo a la sala de conciertos genera espacio en varios niveles para acomodar vestíbulos y bares, así como salas de ensayo, vestuarios e instalaciones de servicio. Hans Huber Saal continuará presentando música de cámara y ahora se accede directamente desde los nuevos vestíbulos.

Los nuevos vestíbulos que flanquean la sala de conciertos están dispuestos en dos niveles, con acceso al parquet y al balcón. Hemos expuesto la fachada que da a la sala de conciertos, reflejándola como una nueva pared exterior. Sin embargo, para las paredes finales, utilizamos espejos, un elemento popular del siglo XIX, que hace que la sala sea más espaciosa en combinación con el techo con espejo. Las esquinas del vestíbulo superior están separadas de las paredes laterales, por lo que parece ser un panel flotante y elíptico. Los dos niveles del vestíbulo, con un agujero central, se perciben así como un solo espacio.

En el exterior, nos centramos en la simulación al diseñar la extensión del Stadtcasino, mientras que en el interior celebramos los elementos estilísticos del siglo XIX al aumentar la artificialidad de la forma, el material y el color.

Las escaleras
A pesar de las limitaciones urbanas en la extensión del Stadtcasino, queríamos proporcionar el mayor espacio posible para el público. Por lo tanto, además de los vestíbulos, agregamos huecos tipo logia a las escaleras expansivas, donde las personas pueden quedarse durante los intermedios.

Teníamos el papel pintado original de brocado reproducido por la Fabricación Prelle en Lyon. Fundada en 1752, la compañía ya había tejido estos fondos de pantalla para la Ópera Garnier el año anterior a la apertura de la sala de conciertos en 1876.

Elaboramos un diseño a medida para el nuevo parquet del Casino. La geometría en forma de lente del patrón hace eco del papel tapiz, mientras que el parquet se presenta a izquierda y derecha, siguiendo el grano de la madera en referencia al histórico parquet en espiga de la sala de conciertos.

Inspirándonos en los candelabros de cristal históricos, diseñamos la luminaria "Parrucca": iluminación LED moderna para alinear las escaleras en el casino. El juego de la luz se multiplica por la plata del metal martillado en los techos, que realza artificialmente la habitación.

El Hans Huber Saal, las salas de ensayo y los camerinos
Fritz Stehlin construyó el Hans Huber Saal para música de cámara en 1905 para complementar la sala de conciertos. En gran parte ha sido restaurado a su estado original en cooperación con el Departamento de Patrimonio Cultural. El vestíbulo de los músicos y los vestuarios construidos junto con la sala de música de cámara han sido restaurados de manera similar. Además de volver al esquema de color original, nos referimos a documentos históricos para reconstruir los paneles, ventanas y puertas que habían sido reemplazados en renovaciones posteriores.

Los vestuarios existentes del Hans Huber Saal se han complementado con nuevas habitaciones en el último piso de la extensión para la sociedad del casino. También hay tres ventanas abuhardilladas que ofrecen nuevas vistas de Barfüsserplatz y Barfüsserkirche y, por otro lado, del techo histórico de la sala de conciertos, gracias al patio recién creado.