La torre residencial se eleva 110 metros sobre el nivel del mar y tendrá un impacto significativo en el paisaje urbano de Estocolmo. Su diseño circular no sólo rinde homenaje a los gasómetros históricos del sitio, sino que también contribuye a crear una familia cohesiva de edificios circulares en los terrenos de la antigua fábrica de gas. Con tres cilindros agrupados, «Stadsljus» se convierte en el gasómetro de próxima generación dentro de un volumen ideal para vivienda.
«Con su combinación de tres cilindros, 'Stadsljus' es una interpretación de los gasómetros históricos del lugar. La torre residencial no sólo refleja la esencia de su época y propósito, sino que, junto a sus contrapartes históricas, forma una familia armoniosa de gasómetros que adornarán el horizonte de Estocolmo y enriquecerán su entorno local».
Torre residencial en la histórica planta de gas de Estocolmo por Cobe y Yellen. Visualización por Cobe y Yellon.
Vivienda para personas en todas las fases de la vida. El edificio contiene aprox. 300 apartamentos de varios tamaños, desde estudios que ahorran espacio hasta apartamentos espaciosos. El 20 por ciento de los apartamentos se ofrecerán mediante un modelo de copropiedad, lo que permitirá que más personas compren una casa en "Stadsljus". Los tres cilindros agrupados del diseño ofrecen condiciones óptimas para la luz natural dentro de cada apartamento. Su forma distintiva permite que las unidades miren en múltiples direcciones, con espectaculares vistas panorámicas de Estocolmo, mientras que muchas unidades tienen una o más terrazas.
Reflejando el contexto La torre se compone de una base, un cuerpo y una corona distintos, inspirados en los gasómetros circundantes. Una base de ladrillo abierta se inspira en la fachada de ladrillo de los históricos gasómetros de Boberg y contiene funciones públicas como un restaurante y un preescolar. Inspirada en el esqueleto de acero racional y repetitivo de otro gasómetro cercano, el cuerpo de la torre consiste en una fachada metálica modular y tridimensional, que captura sutilmente la luz del día en sus superficies en ángulo. Finalmente, la corona es un homenaje a la parte superior de los gasómetros de Boberg con un techo facetado e inclinado y un pronunciado voladizo, que marca el horizonte de Estocolmo, al tiempo que presenta células solares y oculta dispositivos técnicos.
La construcción utiliza un sistema de montaje de fachada modular y prefabricado, eficiente en términos de tiempo, economía, producción y precisión. La fachada se compone de un esqueleto modular que contiene paneles de pared cerrados, ventanas, puertas y balcones, que permiten varias configuraciones para lograr el equilibrio adecuado entre variedad y racionalidad, al tiempo que garantizan un clima interior óptimo en cada apartamento.
El inicio de construcción está previsto para 2026 con ocupación a partir de 2029.