En cuanto a su condición híbrida, la propuesta cuenta con equipamientos dotaciones municipales, como auditorio, sala de lectura o centro cívico, que se entretejen con distintas modalidades de vivienda social. La condición ecológica del proyecto busca minimizar el impacto ecológico del edificio tanto en su proceso de construcción como durante su vida útil. Finalmente, la condición cohabitacional hace referencia a la multiplicidad de formas de habitar actual, planteando viviendas flexibles y adaptadas a las necesidades de confort actuales.
H.E.Co (Híbrido Ecológico Cohabitacional) por AYLLÓN PARADELA DE ANDRÉS Arquitectos. Visualización por AYLLÓN PARADELA DE ANDRÉS Arquitectos.
Descripción del proyecto por AYLLÓN PARADELA DE ANDRÉS Arquitectos
Convertida en tema central del debate político y social en la actualidad, la vivienda social debe afrontar una serie de retos para responder a las demandas de la sociedad contemporánea. El primero de ellos tiene que ver con las transformaciones y los desafíos sociales; es decir, con la condición de urbanidad y con los servicios públicos de atención al ciudadano. El segundo de ellos se vincula al cambio climático y la crisis ecológica que amenaza el futuro del planeta. Finalmente, el tercero tiene que ver con el modo en el que vivimos juntos. Como respuesta a estos desafíos, el proyecto se articula desde una triple condición «Híbrida Ecológica y Cohabitacional».
En primer lugar se reseña la «Condición Híbrida» de la propuesta, en la cual una serie de programas dotacionales municipales (auditorio, sala de lectura, centro cívico, etc.) se entretejen con distintas modalidades de vivienda social; a su vez, dicha noción de hibridación tiene también su reflejo en la imagen de la propuesta, adaptada a un contexto urbano heterogéneo y a las distintas orientaciones.
H.E.Co (Híbrido Ecológico Cohabitacional) por AYLLÓN PARADELA DE ANDRÉS Arquitectos. Visualización por AYLLÓN PARADELA DE ANDRÉS Arquitectos.
Este último aspecto se vincula también con la «Condición Ecológica» que caracteriza la intervención. En esa línea se persigue minimizar su impacto ecológico a todos los niveles: desde el proceso de construcción del nuevo edificio (fomentando la economía material y el uso de materiales de km.0, recurriendo a estructuras industrializadas de madera contralaminada etc.), hasta la vida útil de servicio del conjunto, apostando por reinterpretar diversas estrategias pasivas de la tradición vernácula para contribuir al ahorro energético global (galerías acristaladas a sur, uso de espacios intermedios etc.).
Finalmente, en tercer lugar es imprescindible apuntar la «Condición Cohabitacional» del proyecto como respuesta a la multiplicidad (y volatilidad) de formas de habitar demandadas por la sociedad actual. Se plantea la coexistencia de distintas variantes de viviendas flexibles, versátiles y con unas elevadas condiciones de confort que permiten acoger múltiples formas de habitar en función de su configuración, dimensión o vinculación con los distintos espacios comunes del conjunto que fomentan la idea de vida en comunidad (viviendas tipo cohousing para mayores y/ó jóvenes, viviendas tipo dúplex etc.) A su vez, dentro de su diversidad, todas las tipologías comparten un esquema tipológico análogo a partir de un riguroso esquema estructural industrializado que asegura que todas las viviendas cuenten con doble orientación y vistas cruzadas al entorno.