El interior se convierte en un interesante juego de espacios, iluminación y encuadres del paisaje exterior que le permiten una atractiva riqueza espacial y visual, sin renunciar a una rica activación espacial interior.
La neutra textura exterior del hormigón en el exterior contrasta con la madera clara y las paredes blancas del interior donde la luz, los juegos espaciales de doble altura y los espacios más privados, dialogan con una idea de ligereza.
Casa SV por Spaceworkers. Fotografía por Fernando Guerra.
Descripción del proyecto por Spaceworkers
La casa SV está ubicada en un contexto rural rodeada de las típicas casas tradicionales con cubiertas inclinadas, pequeñas ventanas y envuelta por una arquitectura anónima.
El terreno de la casa es donde alguna vez estuvo la casa de los abuelos propietarios, es de pequeña escala pero enorme en historias y recuerdos para toda la familia.
Desde el principio sabíamos que queríamos crear algo disruptivo en este entorno, algo que se destacara claramente entre la multitud pero que al mismo tiempo fuera tranquilo y silencioso para la calle, ofreciera privacidad a sus habitantes y le diera a los suyos una nueva perspectiva de la vida.
Casa SV por Spaceworkers. Fotografía por Fernando Guerra.
La casa se materializa en un bloque de hormigón donde las aperturas de los diferentes espacios van más allá de la mera necesidad de ventilación e iluminación natural. Desde el exterior, son un elemento importante en la composición de los alzados y en la percepción de la ocupación de la casa que revelan, pero sin revelar demasiado. Internamente, estas aberturas se centran en enmarcar piezas del paisaje lejano, o incluso del cielo, evitando los alrededores cercanos salpicados de casas.
Cada espacio tiene una mirada crítica sobre un punto particular del paisaje, permitiendo al usuario diferentes vistas de un mismo paisaje dependiendo de la posición y el tamaño de la ventana que esté mirando.
En el exterior, el uso de hormigón visto enfatiza la idea de solidez que queríamos expresar en contraste con la madera clara y las paredes blancas del interior que expresan ligereza. Es también en esta dicotomía que la casa se relaciona con sus vecinos y con quienes la habitan y caminan por sus espacios.