La casa diseñada por Jesús Aparicio cuenta con una vista privilegiada al Museo del Prado, además, se trata de un lugar muy luminoso. La actuación realizada ha realzado la fuerza y la atracción que tiene el museo sobre la vivienda.
Descripción del proyecto por JESUS APARICIO ARCHITECTURAL OFFICE
La reforma que esta casa plantea es dividir la función entre una zona servidora y otra servida. La primera se desarrolla en la zona más interior de la casa, aprovechando para su iluminación y ventilación los huecos a los patios de luces existentes. Una única estancia estructurada con mobiliario se ubica a lo largo de la fachada y frente al más importante museo-pinacoteca que desde el siglo XVIII tiene Madrid.
La actuación material ha querido poner en valor las muchas cosas positivas que existían antes de la intervención: un lugar único, la altura libre considerable de la vivienda y la estructura de hormigón. La actuación ha potenciado la presencia del museo en el interior de la vivienda, ha mantenido la mayor altura posible del espacio interior y ha dejado vista la estructura en donde esta tenía un valor espacial. Como telón de fondo de lo anterior, se ha colocado un suelo de tarima de roble blanquecino a toda la casa.
Una casa que está tensada por dos estancias principales en sus extremos: el estar frente al museo y una cocina luminosa que aprovecha una claraboya y unos huecos altos existentes.