El proyecto crea zaguanes pasantes que permiten aumentar la conexión calle-patio e incentivan la conexión de la ciudad con el espacio privado. El acceso a los áticos se produce por el exterior activándose como espacio colectivo y de encuentro para los vecinos.
Para optimizar las condiciones ambientales, se incentiva el uso de recursos arquitectónicos de control climático pasivo. La orientación sur-norte ayuda a proponer soluciones muy diferentes en ambos lados: en el sur unas terrazas continuas protegidas por celosías móviles, y en el norte la fachada se fragmenta gracias a los núcleos húmedos que a su vez sirven como captadores solares.
En el interior, los espacios mecánicos y húmedos de las viviendas se trasladas al perímetro, liberando el resto del espacio, flexibilizándolo y permitiendo que tenga uso doméstico cambiante. Las viviendas son pasantes garantizando la renovación de aire. Los espacios «servidos» o «principales» son iluminados y ventilados a través de los espacios «servidores» o «secundarios».
Edificio de viviendas en Torrent por RAUM 41_42. Fotografía por Alejandro Gómez Vives.
Descripción del proyecto por RAUM 41_42
Mediante cuatro estrategias aplicadas a la arquitectura se ha tratado de incrementar en la medida de lo posible la calidad urbana y arquitectónica de un contexto estridente y sin identidad. Frente al caos de las infinitas respuestas arquitectónicas y soluciones materiales del entorno se propone la neutralidad y el silencio. Frente a unos interiores de manzana privados y enclaustrados se propone una tímida apertura de la manzana a la ciudad. Ante unas condiciones climáticas óptimas, se incentiva el uso de los recursos arquitectónicos de control climático pasivos y ante un estancamiento en la capacidad de adaptación del espacio doméstico contemporáneo se propone un interior libre y con capacidad para el cambio.
Se trata de un edificio de 26 viviendas ubicado en una zona de ensanche de la localidad valenciana de Torrent.
Sobriedad frente al caos
La ubicación del edificio en un contexto caótico en lo que a imagen arquitectónica se refiere así como su implantación singular como remate de una manzana incompleta, nos lleva a proponer un edificio contenido y neutro en cuanto a la variedad cromática (se decide un tonalidad monocroma, gris para todo él) así como contundente y continuo en cuanto a su percepción volumétrica.
A sur, su fachada más expuesta, se propone una solución a escala urbana, un volumen continuo y contundente que recupera y pone en valor la curva exigida por el planeamiento potenciando así una imagen dinámica del edificio.
Edificio de viviendas en Torrent por RAUM 41_42. Fotografía por Alejandro Gómez Vives.
A norte sin embargo, el volumen se fragmenta dando lugar en su patio a una escala más doméstica, un espacio a su vez más estático y relajado.
El testero por su parte se gira a poniente y cambia su material ofreciendo una fachada singular a un exterior más abierto.
El edificio se expone a su vez formalizándose en cuatro volúmenes de texturas diversas que revelan las tres tipologías de vivienda existentes así como el bajo y entresuelo comercial exigido por la normativa de la zona.
Las discontinuidades funcionales se materializan con los cambios de material y textura. Ladrillo cara vista o en celosía para el volumen principal, chapa de aluminio minionda en la esquina o lisa en los áticos desmaterializan los extremos y revelan las diferentes tipologías existentes en el edificio. Manteniendo en cualquier caso una imagen monocroma.
Edificio de viviendas en Torrent por RAUM 41_42. Fotografía por Alejandro Gómez Vives.
Conexión espacio público-privado
El edificio propuesto trata reinterpretar el espacio privado y ceder parte tanto a la ciudad como a sus habitantes mediante tres estrategias. Por un lado no se cierra la manzana sino que se retranquea en la esquina, elevándose y permitiendo el paso a su interior. Al mismo tiempo se fragmenta y se curva suavizando y marcando el acceso al patio. El volumen fragmentado controla y reduce su escala en este punto haciendo más amable la entrada
Los zaguanes por su parte son pasantes potenciando dicha conexión entre la calle y el patio de manzana, incentivando el tránsito de la ciudad a este espacio concebido en el planeamiento como un espacio privado.
Como tercera estrategia, el acceso a los áticos se produce por el exterior de forma que la terraza norte, normalmente privada, se convierte en un espacio colectivo amplificando los espacios de encuentro para los habitantes del edificio.
Edificio de viviendas en Torrent por RAUM 41_42. Fotografía por Alejandro Gómez Vives.
Optimización de los recursos climáticos
La orientación de la parcela norte-sur nos lleva a proponer soluciones opuestas y complementarias en cada una de sus fachadas:
A sur se plantea una fachada profunda proporcionando, en un contexto como la ciudad de Valencia y mediante terrazas continuas, un espacio de sombra activo y usable durante la mayor parte del año. Mediante mallorquinas móviles (que refuerzan la homogeneidad del volumen), se protege del sol de sur y se proporciona a la vivienda un espacio intermedio que matiza la transición entre la vivienda y la ciudad, al mismo tiempo que confieren protección visual e intimidad a los espacios de baño.
Los volúmenes retranqueados en la fachada sur emergen de nuevo en la fachada norte, esta queda fragmentada por los espacios de las duchas que como volúmenes rotundos se abren en sus laterales tratando de captar la luz y el sol de levante. El baño en este caso funciona como captador solar.
A oeste los huecos disminuyen y se protegen del sol mediante lamas verticales y fijas.
Las escaleras de circulación generales ventilan e iluminan mediante una celosía que las refresca proporcionando una circulación y flujo del aire en el edificio y marcando los accesos.
El edificio es completamente pasante de norte a sur de este modo se ayuda a la renovación del aire mediante la generación de corrientes y se elimina el aire caliente sustituyéndose por aire fresco.
Edificio de viviendas en Torrent por RAUM 41_42. Fotografía por Alejandro Gómez Vives.
Dignificación de los espacios servidos
Se propone una tipología de vivienda en la que los espacios mecánicos y húmedos se desplazan al contorno liberando de este modo el resto del espacio doméstico
Las estancias de baños y cocina, actúan como un filtro grueso en fachada matizando el espacio interior. permitiendo un interior flexible y cambiante
Se propone una vivienda pasante cuyos espacios interiores “principales” “espacios servidos” iluminan y ventilan a través de los espacios “secundarios” “espacios servidores” se invierte así el concepto de espacios servidores y servidos poniendo en valor los espacios de baños y cocina tratando de regenerar así la idea convencional de la vivienda.