El foco de la presentación es el Manifiesto del Tensionismo. Organic Building – the City in Space – Functional Architecture, que persigue la idea de una ciudad del futuro que flota libremente en el espacio. Mostrado por primera vez por Frederick Kiesler en la Exposition Internationale des Arts Décoratifs et Industriels Modernes en París en 1925, este fue considerado en ese momento como uno de los conceptos arquitectónicos más radicales que jamás se haya presentado al público.
Junto al manifiesto, la exposición también presentará fotografías, un modelo y elementos de audio. También se está preparando un programa complementario con debates sobre la exposición, así como una publicación con fotografías, el manifiesto y otras referencias bibliográficas.
París 1925: Josef Hoffmann invita a Frederick Kiesler a diseñar la sección sobre teatro austriaco en la Exposition Internationale des Arts D coratifs et Industriels Modernes. Sin embargo, se limita a utilizar la arquitectura de la exposición como pretexto para desarrollar una monumental escultura geométrica abstracta que se encuentra suspendida del techo. Además de su función real como soporte para los elementos de la exposición, la emplea principalmente como una visualización a modo de modelo de su idea de una ciudad del futuro que flota libremente, que propaga, con gran extravagancia mediática, como la Ciudad en Espacio.
Junto al Pabellón Soviético de Konstantin Melnikov y el Pavillon de l'Esprit Nouveau de Le Corbusier y Pierre Jeanneret, la Ciudad en el Espacio es uno de los conceptos arquitectónicos más radicales de la exposición de París. Incluso en ese momento atrae una atención considerable en la escena internacional del arte y la arquitectura y se convierte rápidamente en un ícono arquitectónico del siglo XX.
Kiesler supera la radicalidad de la realización maqueta en el espacio expositivo en Manifesto of Tensionism. Organic Building – the City in Space – Functional Architecture, que publica en dos de las principales revistas de vanguardia, De Stijl y G, publicadas por Theo van Doesburg en los Países Bajos y Hans Richter en Berlín, respectivamente.
Manifiesto del Tensionismo.
Edificio Orgánico—la Ciudad en el Espacio—Arquitectura Funcional
París, 19 de abril de 1925
F. KIESLER
La compulsión dirige la nueva forma de la ciudad:
El Campo-Ciudad: se abolirá la división ciudad-campo.
La Ciudad-Tiempo: el tiempo es la medida de la organización de su espacio.
La Ciudad-Espacio: flota libremente en el espacio en una federación descentralizada dictada por la formación del terreno.
La Ciudad-Automática: se mecanizan los procesos de la vida cotidiana.
¿Qué son nuestras casas sino ataúdes que se elevan de la tierra al aire? Una historia, dos historias, mil historias. Tapiada por dos lados, por diez lados. Piedra sepultada – o madera, arcilla, hormigón. Ataúdes con orificios de ventilación.
Los cementerios tienen más aire para los esqueletos de sus muertos que nuestras ciudades para los pulmones de sus vivos. Cada tumba tiene su césped, su trozo de prado, un camino de grava para separarla de sus vecinas. Cada tumba un islote de verde. Cada uno su propio amo: cada uno su propio asentamiento. [¡Agricultores, que esto sea un ejemplo para ustedes!]
¿Y nuestras ciudades?
Paredes, paredes, paredes…
No tendremos más muros, estas armerías para el cuerpo y el alma, todo este blindado
civilización; con o sin adorno. Queremos:
1. Transformación del área circundante del espacio en ciudades
2. Liberación del suelo, abolición del eje estático
3. Sin paredes, sin cimientos
4. Un sistema de vanos (tensión) en el espacio libre
5. Creación de nuevos modos de vida y, a través de ellos, las exigencias que remodelarán la sociedad.
¿Hemos encontrado un buen trozo de carroña? Que nos quedemos pegados a un lugar y allí y sólo allí nos hundamos en los dientes [, y busquemos y busquemos]; en el lugar exacto donde se construye esta ciudad de Londres, Nueva York, París…? que debemos apilar unos encima de otros; y ten miedo; y se sientan uno en el cuello del otro.
¿Son estas SUS preguntas? ¿Tienen o no adornos las paredes? ¡Un higo para tales preguntas! Dejen fuera las paredes, ustedes, fundadores y venales imitadores, aspiren aire fresco a través de SUS propios poros, ¡y esa pregunta ya no existe! ¡Golpeen SUS cabezas contra el espacio vacío! ¡Debemos tener algo de qué reírnos!
Estamos saciados de arquitectura. No queremos nuevas ediciones, aunque estén muy bien diseñadas. En lugar de los viejos modelos de una sola cara enloquecidos, modelos sencillos de cuatro caras; para las curvas barrocas, las líneas rectas; para ventanas ojivales, ventanas rectangulares. El experto está en quiebra. Lo que interesa a todos es: cómo se vive entre estas paredes curvas o rectas; ¿De qué tipo de vida, de vida nueva, surgen estos cuatro o x rostros?
En lugar de ornamento, paredes lisas; en lugar de arte, arquitectura: estas son sus demandas. Pero debemos tener un edificio orgánico; la ciudad en el espacio; arquitectura funcional.
Elasticidad de la construcción adecuada a la elasticidad de la vida.
Es irrelevante si las cúpulas o los cubos de la cúpula del hombre. De cualquier manera se asfixia. Y tus ventanas no hacen nada para liberarlo.
Uno debe descubrir el impulso de la era, como se descubrió la electricidad. Hay que inventar nueva vida, como se inventó el motor. Hasta entonces, esta vida es simplemente un proceso de digestión física.
La nueva ciudad traerá consigo la solución de los problemas de tránsito e higiene; hacer posible la diversidad de la vida privada y la libertad de las masas. No está construido para bastarse a sí mismo, sino, mediante la más estricta economía de medios, para crear la mayor abundancia posible.
Ya no existirán casas que dominen al hombre, que le griten: “Duerme bien, come bien y toma una bocanada de aire de vez en cuando”. Y con la desaparición de las casas concebidas con este espíritu, las calles de cubos amontonados se resolverán en áreas libres de vida y trabajo.
Siempre has entendido mal:
El maestro de ceremonias de un nuevo estilo presenta un círculo ante sus narices y ¡alboroto! Saltaste a través de él. Justo ahora es un rectángulo. ¿¿¿Mañana???
Tenga cuidado de que el jade que está montando no se escape debajo de usted y arroje estas narices inquisitivas al lodo.