La Real Fábrica de Tapices de Madrid abre sus puertas por vez primera con motivo de la jornada de visitas a edificios organizada por Open House 2016, que además, este año, coincide con la Semana de la Arquitectura. Un espacio Cargado de tradición en el que las habilidosas manos de los reposteros no os dejarán indiferentes. Os prometemos que desde que entréis a la galería de comunicación y veais los enormes tapices que allí se exhiben quedaréis prendados de este singular espacio de Madrid.
La Pérdida de los Países Bajos por parte de la Corona española en la guerra de Sucesión determinó la necesidad de crear una industria nacional para la fabricación de los tan apreciados tapices, que por aquella época eran considerados de mayor valor que la obra pictórica. Para ello, el entonces Monarca Felipe V consiguió finalmente traer de Amberes a una familia de tejedores que, bajo la dirección del patriarca, Jacobo Vandergoten “El Viejo”, se estableció en Madrid cerca de la puerta de Santa Bárbara, en la zona donde se sitúa hoy la Plaza de Santa Bárbara.
No fue hasta el siglo XIX que la manufactura se traslada al extrarradio de la ciudad, en los alrededores de la actual Estación de Atocha, en un terreno de propiedad real conocido como el “olivar y huerta de Atocha”. El edificio de nueva planta fue encargado al académico y Arquitecto Mayor de Palacio José Segundo de Lema, quien hizo el proyecto en 1884 y dirigió su construcción hasta la terminación de las obras en 1889.
Para la construcción se siguió el criterio de combinar el principio de economía con un lenguaje castizo de estilo Neomudéjar, que representara la tradición madrileña y española. El resultado fue un conjunto de pabellones, entre los que destaca el pabellón central de 3 alturas albergando la recepción y las antiguas viviendas de los directores, organizados entorno a un jardín central en donde se realizaban las labores de lavado y secado de los tapices, empleando elementos que se conservan aún hoy.
En 2006 el edificio fue nombrado Bien de Interés Cultural, lo que impulsó su posterior labor de rehabilitación dos años más tarde, a manos del arquitecto Gregorio Marañón.
Hoy en día en el complejo se reunen las tecnologías más punteras para la limpieza de tapices, con maquinaria y archivos originales del siglo XVIII. Inmensos espacios alquilables para eventos así como la sede física de otras entidades sin relación con las labores artesanas de la fábrica rodean también el jardín, un pequeño oasis en el que las plantas tintoreras inundan ahora este recinto verde.
REAL FÁBRICA DE TAPICES.
Dónde.- C/ Fuenterrabía,2. Madrid (España).
Cuándo.- Sábado 1, de 10.00 a14.00 h. y de 16.00 a 20.00 h. y desde el domingo 2
al Martes 4, de 10.00 a 14.00 h.
Inscripción.- Sin inscripción