También los valores de sus paisajes urbanos difieren de los que caracterizan a la urbe occidental. La estructura urbana japonesa se desarrolló de acuerdo a la preferencia que su cultura otorga a la espontaneidad, la flexibilidad y lo difuso en todos los ámbitos, lo cual también tiene su reflejo en el entorno construido.
HIROSHIGE, UTAGAWA (1857). Cien famosas vistas de Edo. Nº 51 (Verano). La procesión Sanno en Kojimachi itchome. Xilografía a color. © Brooklyn Museum.
La atención a los fragmentos siempre se ha priorizado frente a la consecución de un todo completo y claramente definido. Es lógico entonces que a la hora de ejecutar su serie Cien famosas vistas de Edo (1856-1859) un artista como Utagawa Hiroshige (1797-1858) evitara nuestra acostumbrada representación de vistas panorámicas y las sustituyera por un método de representación aditivo, consistente en la suma de sus lugares más célebres. La imagen de la antigua Edo, origen de la actual Tokio, parecía tener más sentido cuando se presentaba como una suma de instantes memorables que no tenían que considerarse simultáneamente.
HIROSHIGE, UTAGAWA (1857). Cien famosas vistas de Edo. Nº 81 (Otoño). Ushimachi en Takanawa. Xilografía a color. © Brooklyn Museum.
HIROSHIGE, UTAGAWA (1857). Cien famosas vistas de Edo. Nº 99 (Invierno). Templo Kinryuzan en Asakusa. Xilografía a color. © Brooklyn Museum.
De esta forma, gran parte del interés de la serie reside en que recrea la memoria de determinados edificios o enclaves de la ciudad en diferentes estaciones del año, que pueden considerarse entonces uno a continuación del anterior, asegurando la continua rememoración de su recuerdo. Agregando y sustrayendo los diferentes elementos del diseño arquitectónico, la casa japonesa también se adapta a los cambios de las estaciones, los diferentes usos y las necesidades sociales. En este tipo de organización espacial los elementos individuales generan un conjunto menos predeterminado de lo que cabría pensar, gracias a la flexibilidad en las conexiones entre las partes. A su vez, el conjunto, entendido como una agregación o una agrupación de elementos, garantiza la coherencia de los fragmentos. En términos prácticos de este tipo de diseño, los espacios exteriores desempeñan un papel tan importante como el de los propios objetos arquitectónicos, al crear ámbitos intermedios entre éstos y el paisaje.
Retrato de Hiroshige por Kunisada I. © Museum of Fine Arts. Boston.
Tadao Ando en 1993. © The Irwin Penn Foundation.
En los edificios del arquitecto japonés Tadao Ando (*1941) las relaciones con el entorno circundante se expresan mediante una teoría de carácter dual. El arquitecto hace hincapié en el contexto en el que un edificio se origina. Su arquitectura es definitivamente moderna y, por tanto, exige tanto un método de composición de conjunto (de un tipo que la arquitectura tradicional japonesa ha sido incapaz de generar), pero al mismo tiempo proporcionar otro que asegure el desarrollo de las partes individuales. Para ello introduce el orden arquitectónico sobre la base de una geometría basada en las formas simples. Por otra parte, intenta dar respuesta a las fuerzas latentes de la región particular donde está trabajando, y de esta manera llevar a cabo una teoría de partes fundamentada en la sensibilidad del pueblo japonés (1).
El profesor Félix Ruiz de la Puerta ha confirmado como este método proyectual de Ando refleja una composición aditiva del espacio donde las partes se van incorporando a la estructura global, creando una composición en la que tanto el todo como los fragmentos conservan su autonomía. Éstos son completos en sí mismos y se complementan en el conjunto. Esta concepción del espacio permite definir la obra de Andocomo “una arquitectura abierta, es decir, una arquitectura que posibilita la modificación de la misma mediante futuras ampliaciones” (2).
ANDO, TADAO (1979-81). Casa Koshino. Ashiya (Japón). Boceto. © Tadao Ando, Architect & Associates.
El documental de 2009 titulado “Tadao Ando / La Casa Koshino” del realizador finlandés Rax Rinnekangas (*1954) revela la vivienda como una colección de fragmentos del vocabulario arquitectónico del arquitecto. La composición original de 1983 reunía dos cajas de distinta longitud en las montañas de Ashiya (Japón) que, dispuestas de forma paralela, se apoyaban en la pendiente una a continuación de la otra y unidas por un patio que salvaba la diferencia de nivel incorporando un graderío.
ANDO, TADAO (1979-81). Casa Koshino. Ashiya (Japón). Plantas. © Tadao Ando, Architect & Associates.
ANDO, TADAO (1984). Taller de la Casa Koshino. Ashiya (Japón). Axonometría. © Tadao Ando, Architect & Associates.
Tres años después de la conclusión del encargo inicial, la diseñadora de moda Hiroko Koshino transmitió al arquitecto la necesidad de incorporar un estudio. A pesar de ese concepto completo y perfecto que Ando intenta hacer aparente en la concepción global de sus obras, cuando el carácter de lo existente es más fuerte que lo que podría ser construido en su lugar, las renovaciones y ampliaciones se presentan como la dirección adecuada.
En contraste con la composición lineal de las piezas existentes, la adición consistió en un muro contra el terreno que recorría un cuarto de circunferencia y se apropiaba de un nuevo espacio semienterrado en la parte superior de la pendiente. Una hendidura que recorría el muro se resolvía con un lucernario, donde la luz entrante ofrecía en las intersecciones complejos patrones sobre la superficie curva, en oposición a los patrones rectilíneos de luz en el edificio original. Finalmente, el fuerte contraste que esta adición planteó en el método compositivo no hizo sino reforzar la unidad arquitectónica de la vivienda (3).
ANDO, TADAO (1984). Taller de la Casa Koshino. Ashiya (Japón). Axonometría. © Tadao Ando, Architect & Associates.
ANDO, TADAO (2004-06). Pabellón de invitados para la Casa Koshino. Ashiya (Japón). Plano de emplazamiento y sección longitudinal. © Tadao Ando Architect & Associates. 1. Guardarropa. 2. Dormitorio. 3. Salón. 4. Habitación con tatami.
Veinte años después de la incorporación de aquel estudio, la propietaria solicitó de Ando la tarea de renovar el ala de dormitorios al sur de la vivienda, ya que sus hijos habían crecido y rara vez la utilizaban. Esta parte de la casa se reinventó como una casa de huéspedes de dos plantas, capaz de funcionar de forma independiente.
ANDO, TADAO (2013). Galería de la Casa Koshino. Ashiya (Japón). Vistas del interior de la sala principal. © Hiroko Koshino Co., Ltd.
En la conciencia personal del arquitecto y a efectos prácticos de composición espacial la construcción había sido un edificio terminado, pero Ando retomó una vez más los estudios para entenderla como un lugar que incluyera los edificios existentes (4).
Con la ayuda del arquitecto, en la actualidad la propietaria ha reconvertido la construcción en una galería de arte donde pueda colaborar con artistas de todo el mundo y realizar actividades de apoyo a jóvenes talentos. La Galería KH en Ashiya (2013) cuenta con una atmósfera concentrada para que los visitantes disfruten de las obras de arte en un marco arquitectónico semejante al de un museo. Los visitantes de la galería que completen el recorrido pueden encontrarse con el área de la cocina y el comedor original, que ha conservado su antigua disposición.
ANDO, TADAO (2013). Galería de la Casa Koshino. Ashiya (Japón). Vistas del interior de la sala principal. © Hiroko Koshino Co., Ltd.
La constante evolución de esta vivienda no parece haber debilitado sus temas centrales ni su imponente presencia arquitectónica. Relataba el escritor japonés Fukuyiro Wakatsuki (1881-1927) que uno de los juegos favoritos de los poetas de su país consistía en componer medio uta (poesía de treinta y una sílabas) y rogar a otra persona que la completara (5). Del mismo modo, dejar inacabada la obra podría significar para Ando dirigirse hacia la eternidad, intentando abarcarla mediante un tipo de expresión que no ha cerrado sus límites finitos y pretende identificar así el objeto con su entorno.
NOTAS.-
(1). ANDO, TADAO (1982). From self-enclosed Modern Architecture towards universality, en DAL CO, FRANCESCO (1995). Tadao Ando. Complete works. Londres: Phaidon, p. 446.
(2). RUIZ DE LA PUERTA, FÉLIX (1995). Lo sagrado y lo profano en Tadao Ando. Madrid: Álbum, Letras y Artes, p. 108.
(3). ANDO, TADAO; EISENMAN, PETER; FRAMPTON, KENNETH y KUNIHIRO, GEORGE T. (1989). Tadao Ando: the Yale studio & current works. Nueva York: Rizzoli, pp. 30-31.
(4). ANDO, TADAO (2007). Tadao Ando 1. Houses & Housing. Tokio: Toto, p. 162.
(5). WAKATSUKI, FUKUYIRO (1926). Le Japon traditionnel. París: Au Sans pareil (versión castellana de M. Perales (1939). Tradiciones japonesas. Madrid: Espasa-Calpe), p. 23.