La mayoría de la arquitectura está diseñada para ser eficiente y social. ¿Dónde están los edificios que nos permiten experimentar la pasión y el placer?
Es curioso lo poco que los arquitectos han tenido que decir sobre el tema del sexo. Si están diseñando de forma rutinaria los edificios en los que ocurre el sexo, entonces deberiamos esperar que dedicasen más tiempo pensando en ello. Los edificios alojan y son el marco de nuestra vida sexual — Aeon
Masivos rascacielos modernos, obeliscos, torres, todo son estructuras que, gracias a su forma fálica, a menudo se asocian con el sexo. Otros edificios están más sutilmente conectados, ya que proporcionan los marcos de nuestra vida sexual y actúan como detonadores de nuestros recuerdos sexuales. Esta relación entre el sexo y los edificios fue más importante que nunca en los Estados Unidos y Europa durante el turbulento siglo XX, cuando surgió una cultura de tolerancia y de liberalización sexual sin precedentes, llegando a dominar muchos aspectos de la vida pública.
Mitad historia de arquitectura, parte historia cultural, y parte cuaderno de viaje, Sex and Buildings / Sexo y Edificios, explora cómo las actitudes sexuales progresistas se manifiestan en la arquitectura, preguntando si esta sexualidad puede determinar condiciones arquitectónicas y explorar los éxitos y fracasos de los intentos de los edificios por reflejarlo. En la búsqueda de estructuras que reflejan las costumbres sexuales de sus habitantes, Richard J. Williams visitó edificios modernos en el sur de California, el Westin Bonaventure Hotel, la Mansión Playboy en Chicago, el Seagram en Nueva York, las comunas de la década de 1960, y más. Una mirada fascinante y a menudo divertida en un período de extraordinario cambio social junto con la invención estética.
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CRÉDITOS.
Editorial.- Reaktion Books. Coming out.- 10 junio 2013
Tamaño.- 208 × 156 mm
Número de páginas.- 224 p.
Cubierta pasta dura.
ISBN.- 9781780231044