5468796 Architecture planteó una estrategia de intervención que permitió establecer un vínculo entre el propietario del terreno, la administración municipal y la inversión privada, asegurando así la conservación exitosa del edificio.
Situado en el Distrito Histórico Nacional Exchange, el conjunto se organiza en torno a dos bloques residenciales que flanquean el edificio patrimonial, ahora reconfigurado con un programa de oficinas y restaurante.
Cada bloque residencial se sitúa estratégicamente para generar nuevas relaciones urbanas, respetando la volumetría original y favoreciendo la escala humana. Los alzados norte y sur están definidos por huecos de escalera al aire libre, que ofrecen vistas a la ciudad, el río y el parque.
Edificio comercial y residencial Pumphouse por 5468796 Architecture. Fotografía por James Brittain.
Los accesos se ubican entre las fachadas del conjunto histórico y las entradas a los edificios de viviendas, permitiendo que otros espacios de transición acojan dos anfiteatros al aire libre y plazas públicas. Las circulaciones peatonales se refuerzan con la incorporación de dos pasarelas que vinculan los bloques residenciales con los edificios protegidos.
El juego de volúmenes genera corredores intermedios en todos los niveles, estableciendo un diálogo entre lo antiguo y lo nuevo. Las viviendas fueron proyectadas con ventilación cruzada, lo que no solo mejora la iluminación natural, sino que también fortalece la relación con el entorno.
Edificio comercial y residencial Pumphouse por 5468796 Architecture. Fotografía por James Brittain.
Descripción del proyecto por 5468796 Architecture
Construida en 1906, la histórica estación de bombeo de James Avenue de Winnipeg estaba destinada a ser demolida después de 14 intentos fallidos de revivirla. Asumiendo un papel fuera del ámbito habitual de los arquitectos, 5468796 Architecture desarrolló un diseño conceptual no solicitado junto con una proforma financiera y presentó el caso de negocio a un cliente existente. Esta combinación finalmente condujo a la exitosa conservación del edificio y a una nueva vida.
Dos intervenciones específicas hicieron viable el proyecto: en la primera fase, se aprovechó la capacidad de la grúa pórtico original para suspender un "piso flotante" sobre la maquinaria de la sala de bombas. En segundo lugar, se obtuvo una enmienda de zonificación para construir un edificio residencial de cinco pisos en una franja de tierra de 13 metros de profundidad entre el edificio patrimonial y la calle, abogando por la restauración del paisaje urbano industrial original que lindaba con la antigua línea ferroviaria. Junto con un segundo edificio de apartamentos más amplio en el extremo opuesto, los desarrollos residenciales hicieron que el proyecto fuera financieramente viable y, al mismo tiempo, expresaran una narrativa histórica distintiva dentro de un área en transformación.
Elevados sobre columnas que extienden la cuadrícula de la estructura de la grúa pórtico, los dos edificios residenciales independientes de altura media se separan del edificio existente, creando nuevos carriles peatonales que respetan la envoltura original de la estación de bombeo, hacen referencia a la escala humana y amplían los frentes comerciales de la planta baja.
Al repensar las normas de los objetivos de eficiencia de las viviendas multifamiliares, el diseño emplea salidas al aire libre y una configuración de parada de contenedores. Los corredores interiores anodinos típicos se convierten en pasillos exteriores vibrantes para la interacción vecinal, convirtiéndose en una extensión de las suites y creando una sensación de propiedad compartida sobre el espacio común. Las escaleras al aire libre brindan vistas despejadas a la ciudad, el río adyacente y el parque.
Este desarrollo multifacético de uso mixto es la primera propuesta en el sitio que ha obtenido el apoyo de los defensores del patrimonio, las partes interesadas municipales y la comunidad en general.
