Hace dos años Paisaje Transversal colaboró en el proyecto Transïtoak, una iniciativa de urbanismo adaptativo impulsada por el Centro Internacional de Cultura Contemporánea Tabakalera de Donostia y al fin, el pasado 15 de junio, se realizó un recorrido por el barrio en el que se visitaron los espacios más singulares con necesidad de ser activados y se instaló un plano gigante para que la gente propusiese actividades y detectase nuevos espacios, fomentando de esta forma la participación infantil y de los diferentes colectivos interesados en los equipamientos del barrio.
Descripción del proyecto por Paisaje Transversal
Dentro de este proyecto Paisaje Transversal nos encargamos de desarrollar #EgiaMapa, un proceso urbano en el barrio de Egia de dicha ciudad que estuvo dividido en dos fases: una primera dirigida a realizar un mapeo colectivo y generar un catálogo de los espacios en desuso del barrio; la segunda tomaba como punto de partida estos resultados y tenía como objetivo el diseño de unos protocolos de activación de los espacios identificados. Se trataba de generar una herramienta que permitiera establecer una serie de pautas fácilmente comprensibles de manera que cualquier persona, de forma autónoma, pudiera poner en marcha iniciativas y desarrollar actividades en las plazas, calles o locales comerciales de Egia.
Transïtoak nace, como su nombre indica, como un proyecto de tránsito. Una estrategia mediante la cual Tabakalera trataba de aprovechar su condición nómada de aquel entonces –está prevista la apertura de su nueva sede para después de verano de este año- para reflexionar sobre los espacios urbanos y los usos que las personas hacen de ellos. Desde la idea del meanwhile urbanism (urbanismo del mientras tanto) aborda también la condición cambiante de estos usos y estos espacios a lo largo del tiempo.
Estrategias.-En este contexto, #EgiaMapa se inicia como un proceso de urbanismo y mediación en el que identificar junto con la ciudadanía y los agentes socio-culturales del vecindario los espacios carentes de actividad y plantear nuevos usos para estos. Se trata con ello de revertir la idea de espacios en desuso hacia el concepto de espacios potenciales. El objetivo de esta primera fase fue por tanto generar una cartografía colectiva y un catálogo de espacios infrautilizados en los que se recogían las necesidades vecinales y los usos propuestos o potenciales de los mismos.
Así, de los resultados obtenidos en la primera fase de #EgiaMapa, surgía la necesidad de trabajar sobre las estrategias para la puesta en marcha de las iniciativas recogidas en ella. Para ello se optó por diseñar un protocolo de activación adaptado a las necesidades del barrio que facilitase la puesta en uso de los espacios identificados, tanto públicos como privados.
Para la segunda fase, Paisaje Transversal, con la inestimable colaboración de Manu Fernández, acometimos la tarea de analizar detenidamente las diferentes normativas y trámites burocráticos que afectaban al desarrollo de actividades tanto en el espacio público como en los locales comerciales. Una vez realizado este estudio desarrollamos los protocolos de activación según el origen público o privado de los mismos.
Por lo que sabemos, estos protocolos ya están siendo utilizados para el desarrollo de actividades en el espacio público, como es el caso de las actividades realizadas con el Txiringailu -un dispositivo móvil para la activación del espacio público diseñado por M-Etxea en colaboración con el equipo de mediación de Tabakalera-, por lo que parece que el diseño de este tipo de herramientas para la activación de espacios puede ser una vía de lo más efectiva para la dinamización de la actividad de nuestras ciudades.