El proyecto desarrollado por Entorno y Contexto se ordena mediante cuatro edificios que conectan la trama urbana con el parque, encontrando un juego de espacios cubiertos, interiores y al aire libre que sirven a las necesidades de la comunidad. La intervención rehabilita los elementos en mal estado preexistentes y establece nuevos espacios donde mirar y conectar con el paisaje.
Reinterpretadas con simplicidad mediante un lenguaje y escala renovados, las cubiertas ligeras se apoyadan sobre la estructura metálica vista, haciendo del nuevo equipamiento un hito reconocible y memorable. La estructura se complementa con el hormigón visto, los muros y celosías de barro, integrando cromáticamente el proyecto en el tono regional.
Parque Lineal del Río Papaloapan por Entorno y Contexto. Fotografía por Andrés Cedillo / ESPACIOS.
Descripción del proyecto por Entorno y Contexto
El Parque Lineal del Río Papaloapan es un proyecto destinado a rehabilitar un espacio público deteriorado en la localidad de Tuxtepec, Oaxaca, entre el límite urbano y el límite natural del río Papaloapan.
Con el objetivo de crear un entorno habitable, las estrategias de proyecto se enfocaron en regenerar la conexión de la ciudad con el río, mediante la integración de un parque ribereño que abarca 11.8 hectáreas de espacio público y se extiende a lo largo de 4.5 km en su primera fase de intervención. Este nuevo espacio está proyectado para fomentar el uso y disfrute colectivo, aspirando a trascender lo local para convertirse, a mediano plazo, en un atractivo de influencia regional.
Bajo un análisis del equipamiento disponible en relación con la estructura socio-demográfica, el proyecto se centró en dotar al parque con un programa diverso que incluye actividades deportivas, culturales, recreativas, sociales y ambientales para satisfacer las necesidades de usuarios con diferentes patrones de asistencia y propósitos. Este enfoque ha revitalizado el uso del espacio y ha generado conciencia ambiental sobre su preservación, al crear áreas que recuperan la ribera del Río Papaloapan, el tercer río más grande y caudaloso de México, y reestablecer la conexión de la población con este importante patrimonio natural, al que habían dejado de prestar atención al considerarlo un espacio residual, peligroso, contaminado y poco atractivo.
«Siguiendo y etendiendo la línea histórica del parque, trabajamos en torno al concepto de articulaciones espaciales para crear una estructura coherente que garantice la legibilidad y accesibilidad del entorno público. Buscamos facilitar la apropiación de los equipamientos recreativos, culturales y deportivos dentro del conjunto, al tiempo que promovemos la recuperación de áreas de valor ambiental y paisajístico. Esto se logra mediante acciones como la liberación de zonas ocupadas informalmente, el saneamiento vegetal, la sustitución de especies no endémicas, la reforestación, y la ampliación de áreas de inundación y absorción de agua de lluvia».
Alejandro Polo Lamadrid.
Dada la histórica vocación industrial de Tuxtepec, se optó por utilizar acero y amplias cubiertas ligeras, reinterpretadas con simplicidad mediante un lenguaje y escala renovados para hacerlas reconocibles y memorables. Se consideró importante que estas estructuras fueran de fácil mantenimiento y tuvieran una vida útil prolongada. Las estructuras se complementan con muros y celosías de tabique de barro, muros de hormigón visto, pisos de cemento pulido y herrerías de acero. La tonalidad roja seleccionada para las estructuras se integra con otras instalaciones realizadas en la región de Oaxaca, como parte de una integración cromática regional.
El proyecto se estructura a través de cuatro edificios de 420 m² cada uno, denominados «palafitos», que articulan la calle con el parque. Estas estructuras ofrecen una variedad de servicios a los usuarios, desde áreas techadas y de espera —a manera de paraderos para el transporte público—, hasta servicios sanitarios, vestidores, espacios comerciales concesionables, áreas para actividades deportivas, zonas de estar y miradores escénicos que permiten contemplar el río y las actividades recreativas cercanas.
Dentro del parque, el programa incluye tres multicanchas y un skate park cubiertos, con una superficie total de 4.100 m², para proteger a los usuarios del calor y la lluvia. Además, hay dos canchas deportivas de uso flexible al aire libre, cuatro canchas de fútbol con césped, una trotapista de 1.3 km con pavimento suave y permeable, una ciclopista de 3.8 km, áreas exteriores que abarcan pump track, juegos infantiles, ejercitadores, plazoletas y foros al aire libre, así como gradas cubiertas y al aire libre, rampas y taludes. Se proporciona iluminación, mobiliario urbano, señalética y soluciones de accesibilidad universal, junto con 11.350 m² de jardinería y reforestación. Además, se incluye un vivero con espacios para la difusión y concientización ambiental, que ocupará alrededor de 5 hectáreas.
Por otro lado, se recuperó una parte del bulevar adyacente al parque, donde se reemplazan pavimentos, luminarias y señalamientos, y se habilitaron áreas de estar y de contemplación del paisaje, sumando una superficie de 8.000 m².
«Tuxtepec, la segunda ciudad más importante de Oaxaca, ha estado históricamente aislada debido a su ubicación entre cadenas montañosas, lo que la ha llevado a tener una mayor relación con los estados de Puebla y Veracruz. Este aislamiento, junto con su orientación comercial e industrial, generó el deterioro de los espacios públicos y el equipamiento recreativo y ambiental. Sin embargo, el renovado parque está atrayendo nuevamente a usuarios de todas las edades y prolongando su estancia gracias a la iluminación proporcionada en los espacios deportivos y áreas de descanso. Se estima que el parque podrá albergar hasta 10.000 usuarios simultáneamente y recibirá alrededor de 5.000 visitantes diarios, según el programa previsto».
Alejandro Polo Lamadrid.