El volumen está fragmentado en tres módulos con techos inclinados que contienen, en el sentido de acceso al interior desde la calle, los espacios de garaje e instalaciones, un área principal con la cocina y la sala de estar, y las habitaciones.
Descripción del proyecto por Tangram
La parcela se encuentra en una urbanización a las afueras de Zaragoza, en el término municipal de Cadrete, y aunque la trama que la define es ordenada y lógica choca con la infinita variedad de tipologías edificatorias siendo el resultado de lo más variopinto.
La propuesta es el resultado de un profundo análisis de la parcela, un sencillo prisma alargado en dirección sur-norte auna una fantástica orientación sureste, protección al fuerte viento predominante (cierzo) que a su vez facilitaba la ventilación cruzada, vIstas hacia las montañas que definen el valle del río Huerva y privacidad. A su vez el volumen propuesto genera un estudiado recorrido de acceso, en el cual la amplia zona ajardinada queda oculta hasta que se accede al interior de la vivienda donde a través de la zona de día la contemplamos por primera vez.
La planta se divide en función de su privacidad en tres zonas claramente diferenciadas. En primer termino el garaje y servicios, un elemento final donde se ubican los dormitorios. Y por último la pieza central, definida como un vacío entre ambos, que se organiza alrededor de un característico mueble central.
El volumen se define mediante los pliegues de la cubierta que responden a cada uno de los módulos funcionales, destacando el elemento central para alojar un pequeño altillo. Los espacios destinados a vivienda se definen mediante una ligera cubierta de madera de abeto diferenciándose del módulo del garaje, más pesado con una losa de hormigón.
La vivienda vive del jardín, donde la naturalización de los límites de la parcela se traslada de forma abstracta a la fachada principal, cuya forma vibrante se relaciona de forma más amable con el entorno que la rodea.
El resultado es un atractivo volumen que cambia desde cada punto de vista, sin embargo, este proyecto y toda su evolución han sido posibles solo gracias al buen entendimiento entre arquitecto y propiedad, la capacidad de esta última para integrarse completamente en el desarrollo del proyecto cuestionando cada decisión de una manera constructiva ha posibilitado llegar con el proyecto mucho más lejos.