Un lugar que contiene unos enormes motores que sirvieron como generadores de energía para la red de metro hasta casi 1930. Afortunadamente no fueron destruidos sino cuidados y preservados, a lo que contribuyó el hecho de que estuvieran alojados en una nave declarada Bien de Interés Cultural diseñada por Antonio Palacios, arquitecto de edificios como los conocidos el Círculo de Bellas Artes o el Palacio de Correos, sede del Ayuntamiento de Madrid.
Accesorios, libros, vinilos, muebles reciclados y muebles sesenteros, zapatos, tocados, flores, mermeladas y bicicletas clásicas. Lo que nos ofrece este mercado son productos creados, diseñados y producidos por sus autores, llevando una cuidadosa selección de los mismos, que intervienen en cada fabricación sin respaldo industrial. Se tratan de piezas únicas, que no pueden encontrarse en otras partes, es por este concepto como este Mercadillo con encanto ha empezado a desarrollar una personalidad propia.
Además de tener un restaurante con pinchos donde te puedes tomar un vino o una cerveza. David Juárez, sushiman de larga trayectoria, prepara lo que le pidas en directo. Y así sus creadores dicen: ¡Si encuentras un sushi más rico que el de Juárez en Madrid te devolvemos el dinero! Pero si no quieres ni vino, ni cerveza, puedes tomar un café o un té en el córner dulce. Café y té con croissants ó cookies de chocolate y brownies.
Un rincón con dos arquitectos a cargo de la diversión infantil a través de talleres para los más pequeños y un hasta un set para actuaciones musicales, grupos callejeros en su mayoría, que trasladan al interior de la nave el ambiente y ritmo de la calle.
Manuel Carrasco, Minimum Origami, se encarga de enseñar a los más peques a construir personajes y objetos en papel y de forma gratuita. Aunque será difícil que no quieran comprarse una de sus figuritas para hacer en casa. Si no les gusta la papiroflexia, podrán llevarse uno de los animales que Isidro Perea vende ya troquelados para ir montando en ratos libres. El equipo de bichos se llama Fauna Urbana, y tiene una mantis religiosa, una mariquita, una abeja, un ciempiés, un camaleón.
Otra novedad también para estas últimas ediciones es el abrir el Mercado de Particulares. Convocan a la gente para que accedan a tener un puesto de venta de sus propias cosas: su librería, su armario, sus antiguas herramientas, su colección de muñecas, su ristra de disfraces, la bodega, o la colección de sellos o el scalextric. El Mercado de Particulares está en el aparcamiento, y los puestos cuestan 35 euros al día ocupando lo que una plaza de aparcamiento y tiene lugar al aire libre.
Gracias a esta iniciativa privada por tanto, se ha podido recuperar esta nave para los madrileños y demás turistas curiosos, que ya lo han convertido en uno de esos lugares imprescindibles para su álbum de fotos de Madrid.
CRÉDITOS.-
Localización.- Valderribas 49,
Horarios.- De 11 a 22 horas. Todos los primeros domingos de cada mes.
Para más información visitar el Mercado de Motores en su página de Facebook.-
