En una intersección de dos ampliamente transitadas calles de Rosario, diseñado por Pablo Gagliardo, principalmente para jóvenes y estudiantes, encontramos el edificio 1101 Pueyrredón. La torre se caracteriza por pequeños apartamentos que se combinan entre si en dobles alturas y grandes voladzos para generar un juego de vacíos y llenos.
El edifcio brutalista permite gracias a sus vanos, amplía luz natural, ventilación cruzadas, permitiendo romper así el aspecto monolítico con de momento tímida vegetación.
Descripción del proyecto por Pablo Gagliardo
Edificio residencial ubicado en la intersección de dos calles arboladas y transitadas, a pocos metros de las principales avenidas y centros universitarios de la ciudad de Rosario, ofreciendo un entorno ideal para jóvenes y estudiantes.
El terreno en esquina, de orientación norte-oeste, y las reglamentaciones municipales permiten la ocupación total del lote, ventilando todos los locales hacia los dos frentes.
Su estructura, de hormigón visto con tablas, permite un juego de vacíos y llenos, generando dobles alturas y visuales cruzadas que, además de permitir grandes balcones arbolados en doble altura, privilegia la calidad e iluminación natural de los ambientes interiores.
Se proyecta un ingreso en doble altura, como una continuación de la vereda pública con abundante vegetación y un bicicletero para uso de sus habitantes, favoreciendo la vida en contacto con la naturaleza. De este modo, el ingreso al edificio se da a través de una gran “plaza interior”. Este espacio, que a modo de fuelle, vincula la vida pública y la vida privada, otorga permeabilidad y conectividad urbana, a través de su recorrido y continuidad espacial y visual.
La obra alterna tres distintas tipologías por piso, donde la principal premisa es la espacialidad y continuidad de los interiores. Las mismas, poseen sus núcleos húmedos conformando una pieza común encastrada en el sector central de la planta a modo de liberar el espacio de uso interior, posibilitando la flexibilidad de los espacios, así como también los distintos usos permitidos, como vivir o trabajar.
El diseño de las unidades es despojado y neto, así es que cada una posee el valor agregado en su balcón, planteado como un ambiente continuo en relación con el interior. Como remate el proyecto posee dos niveles con terraza y piscina propia, posibilitando impactantes vistas panorámicas de la ciudad.