Wutopia Lab proyecta un espacio en el que el color dorado es el protagonista. Esta opción cromática representa la tonalidad de la cosecha del campo. Las líneas rojas marcan su estructura para simbolizar una escena campestre eterna mientras que las pequeñas ondulaciones aparecen evocando los montones del grano recolectado en la cosecha.
La puerta original esta pensada como una instalación móvil. La edificación preexistente de ladrillos y el corral se conservan parcialmente. El almacén para el equipamiento agrícola se renueva y se constituye con una fachada de hormigón liso convirtiéndose en una sala auxiliar. El resto del corral y la vivienda original de dos plantas se mantiene pero se sustituye la fachada por paneles de policarbonato de color crema.
El corral dorado. El País de la Cucaña del hombre corriente por Wutopia Lab. Fotografía por CreatAR Images
Descripción del proyecto por Wutopia Lab
«El Pasado nunca está muerto, ni siquiera es pasado».
-Faithful Place, Tana French.
Wutopia Lab ha transformado el corral abandonado del puesto de avanzada de Dongtanyuan de Bright Food (Group) en el «El país de Jauja de cada hombre'».
El calor era abrasador, de pie al lado de las ruinas, el granero desvencijado, almacenes de equipos y oficinas destartaladas y el suelo lleno de parches. El Sr. Wu me preguntó, mientras me secaba el sudor, qué se podía hacer para convertir estos 8.400 m² de corral de 220 m de longitud total. Estaba un poco perdido debido a que me resultaba extraño y fuera de lugar la propuesta. Estaba un poco confundido nunca me había planteado una obra de esa clase. Le dije que me dejase pensarlo.
¿Ha existido el corral en mi vida? Recuerdo que fue sólo durante un tiempo muy breve. Fue cuando nos pidieron una experiencia obligatoria en agricultura en el instituto, y recogimos el arroz cosechado y lo apilamos en el centro del granero. No habíamos hecho gran cosa, pero estábamos lo suficientemente cansados como para tumbarnos en el suelo o en el montón de grano, jadeando y muriéndonos de hambre. Me acordé de «El pais de Jauja», de Peter Brueghel, que representa el sueño de una «zona de descanso» surgida del interminable trabajo de los europeos en la Edad Media (es un país mitológico del que se hablaba frecuentemente durante la Edad Media). Imaginaban que en algún lugar de la tierra, la gente vivía una vida de libertad: «Sin trabajo y sin preocupaciones por la comida y la bebida, montañas de comida deliciosa, vino y acumulación de vino como el mar». En aquella época, nosotros, que estábamos cansados y teníamos poca comida, no podíamos pensar más allá de lo que él pintaba, la ilusión de la fiesta y la pereza.
«Estoy borracho, estoy borracho de la injusticia del mundo»
Esa misma noche hubo una hoguera y una actuación. Nos comimos toda la comida que habíamos traído de casa y ahorrado durante un mes. Incluso bebimos alcohol por primera vez. Gritábamos sin ton ni son porque sabíamos que al día siguiente nos liberaríamos de la tediosa y dura vida agrícola. Bromeábamos y llorábamos sin reparo, y yo me emborraché por primera vez. La primera vez que vi La Lucha entre el Carnaval y la Cuaresma, me recordó aquella noche de borrachera. Pensé en el breve olvido y la alegría de gozar de un estado de ánimo sin pretensiones, en la inocencia despreocupada.
«Lo que creo que es gratis y falso»
La experiencia obligatoria de agricultura en el instituto pretendía dotarnos de une entrenamiento necesario que nos permitiese superar las dificultades. Sin embargo, no nos dejo mella, no forjamos en nuestro interior el deseo de alcanzar una simple meta en la vida. Querían decirnos que debíamos estudiar bien o ganar dinero, es decir, que imaginásemos una vida que no queremos. El breve jolgorio del corral se convirtió en un momento simbólico, un lugar que guardaríamos en el futuro y al que ansiaríamos volver en cualquier momento y en cualquier lugar de la ciudad. Cuando miro hacia atrás, a los 50 años, me siento un poco avergonzado. Siento que nunca hemos vuelto a tener un momento de indulgencia semejante o al menos sin sentir algún tipo de culpa.
Elysium Mortal
El corral es funcional, para procesar la cosecha y es económico, para contar los puntos de trabajo. Pero por otro lado, es un espacio social donde se producen cotilleos o charlas. Es un espacio ceremonial donde se celebran eventos formales y reuniones que pueden incluir algo como ver una película al aire libre.
Puede ser privado, un lugar con la posibilidad de poder tener citas. Por supuesto, también sirve de espacio público, una plaza de una empresa o de un pueblo. Lo único que no sería es espiritual.
Lo que se asocia al corral es el estilo de vida de la granja y ciertas fantasías materiales de la época. En cualquier caso, la expresión del corral es sencilla y directa.
Decidí utilizar el color dorado para simbolizar el campo de la cosecha, la cosecha que nunca termina. Simplemente quería que el espacio fuera un lugar de «ocio eterno, comida magnífica y edificios comestibles»,sería el paraíso.
En aquella época, no teníamos ningún deseo de quedarnos en el campo, pero ahora lo envidiamos un poco. Después de todas las sorpresas de la vida, creo que los placeres más sencillos son preciosos.
Wutopia Lab utiliza hormigón permeable de color amarillo dorado, que se asemeja a un arrozal, con líneas rojas oscuras para formar una escena de corral: algunas están divididas en bloques, otras están festoneadas, y en las zonas abiertas el terreno se eleva ligeramente, formando un «montón de grano» con alturas onduladas sobre las que pararse. Mirando todo el campo, parece una época de cosecha congelada.
La puerta original está diseñada como una cápsula del tiempo (instalación móvil) del pasado, que conmemora la vivienda original de la isla de Chongming construida con caña: la Huan Dong She, y la casa de ladrillos del granero se conserva parcialmente para conmemorar los recuerdos del antiguo corral durante el periodo del pólder. El almacén de equipos agrícolas original, renovado con una fachada de hormigón liso, se convirtió en una sala auxiliar para el corral. La parte restante del granero y el edificio dormitorio original de dos plantas se conservaron en su forma arquitectónica original, con la fachada sustituida por paneles de policarbonato de color crema para convertirse en la Casa de la Leche Bright, un espacio multifuncional para la investigación y el desarrollo y la exposición de los nuevos productos agrícolas del Grupo Bright.
Al final de la obra, los aseos originales se diseñan como otra futura cápsula (instalaciones móviles), y la línea de tierra de color rojo oscuro se transforma en un cono de cuatro puntas hecho de placas de acero resistentes a la intemperie que puede abrirse y cerrarse, en cuyo interior se almacena un gran número de memorias, cuyo contenido es un mensaje o un dato para futuros familiares, amigos o incluso uno mismo. Diferentes materiales del edificio, como diferentes recuerdos, están dispersos en este campo amarillo de cereales, y cada vez que se entra en uno, parece desencadenar una historia de diferentes épocas que espera que se explore.
En el futuro, se pueden entrelazar diferentes actividades de la ciudad y el campo. Pero para mí es más bien un acto artístico. Es una gran obra de arte de la tierra situada en nuestro familiar paisaje agrícola. Expresa el deseo simple y directo de los mortales de estar desinhibidos, seguros, felices y bien alimentados.
«El pasado está en el presente, pero el futuro sigue en nuestras manos».
Ellie Wiesel
Huevo de Pascua
Cockaigne of Everyman es la tercera obra de la serie de Wutopia Lab para la gente común mágica. Trata de los deseos sencillos y, junto con los recuerdos sagrados y los monumentos heroicos, se convierte en el mundo de los mortales en el Dongtanyuan.
La primera obra: Memorial del hombre corriente.
La segunda obra: Santuario del hombre corriente.
La tercera obra: El país de Jauja del hombre corriente.