Para Ishigami, la arquitectura es un campo abierto de infinitas posibilidades que se extiende a todos los ámbitos de la vida, plantea todas las cuestiones esenciales y debe considerarse desde una perspectiva tan científica como artística. Aparentemente liberado de las reglas y limitaciones de la arquitectura, Ishigami encuentra predominantemente el contexto para sus proyectos en la naturaleza. Y tiene un enfoque continuo en la reinterpretación del límite entre paisaje y arquitectura.
Su pensamiento conceptual está moldeado por la necesidad de entrelazar la arquitectura con lo «natural» y ampliar las fronteras existentes entre el proyecto, la arquitectura y el medio ambiente. Con sus trabajos visionarios, cuya estética se caracteriza por su concentración, transparencia y simplicidad, Ishigami se embarca en una búsqueda holística de una arquitectura para el futuro, en la que la vida de la sociedad se estructure según principios orgánicos.
Plaza KAIT por Junya Ishigami. Fotografía por junya.ishigami+associates.
Los principales proyectos de Ishigami incluyen el Taller KAIT para el Instituto de Tecnología de Kanagawa (Atsugi, Japón, 2008); la Casa de la Paz en Copenhague (2014); la Capilla del Valle en Shandong (China, 2016); el Jardín Acuático Art Biotop (Tochigi/Japón, 2018); y su pabellón para la Serpentine Gallery (Londres, 2019).