El proyecto desarrollado por Pepe Giner Arquitectos, para esta televisiva vivienda, la CTZ2, se ubica en una parcela con una fuerte pendiente frente a la isla del Portixol y a la Punta del Cap Negre, un enclave privilegiado y de gran belleza en la Costa Blanca.
La mayor dificultad del proyecto de la vivienda CTZ2 estribó en adaptarse a la geometría de la parcela y ubicar la zona de día del programa y la piscina en el mismo nivel, para facilitar el aprovechamiento de la orientación sur, que coincide con las mejores vistas hacia el Mediterráneo.
«La vivienda se plantea como un conjunto de sinuosas plataformas que se deslizan entre sí, adaptándose a la escapada orografía. Esas plataformas, recortadas contra el privilegiado paisaje, parecen levitar. En cada una de las plantas de la vivienda, las terrazas bordean la envolvente de cristal para difuminar los límites entre espacios exteriores e interiores».
Pepe Giner.
En la planta baja de la vivienda, la plataforma se ensancha y da lugar a una terraza de grandes dimensiones que se estrecha en los extremos, adaptándose a las condiciones del entorno. Mientras, la terraza alberga un jardín mediterráneo concebido como una continuación de la arquitectura de la vivienda, que ese difumina visualmente con el horizonte mediante una sinuosa piscina.
El espacio a doble altura que hay nada más entrar a la vivienda se organiza a través de una escultórica escalera de mármol negro Marquina, que nos lleva hasta la planta alta, donde se sitúan los tres dormitorios de la vivienda, cada uno con su correspondiente terraza mirando al mar.
«Los cipreses se proyectan como un elemento arquitectónico más y se disponen de modo que atraviesan las perforaciones de las plataformas resaltando la horizontalidad de la vivienda».
Pepe Giner.
El proyecto busca reflejar el entorno único de La Marina, y también proyectar una visión vanguardista. La estructura que soporta los elementos horizontales se resuelve mediante muros de mampostería en seco, que se anclan y contienen el terreno, y a través de esbeltos pilares metálicos se genera una dualidad en los elementos portantes que contrasta con la solidez de las plataformas que dan forma a los niveles de la vivienda.
«La accidentada topografía hace que, lo que en principio parece una desventaja, termine marcando de forma decisiva la morfología arquitectónica del proyecto».
Pepe Giner.