Este volumen, se enfrenta de dos maneras a la calle. La primera mediante un juego de sustracciones, y la segunda a partir de una superficie lisa con transparencias, encajando así armoniosamente en un único cuerpo gracias a la materialidad del conjunto.
«Le Copenhague» cuenta con 21 apartamentos distribuidos en 6 pisos que son colocados sobre un zócalo comercial que, mediante el acristalamiento de su fachada, pretende pasar desapercibido.
Descripción del proyecto por Christophe Rousselle
Este proyecto residencial, ubicado en las afueras de Paris, emerge como un sólo volumen sobrio y de formas simples que oscila entre masividad y transparencia por la alternancia entre el hormigón y el vidrio.
El edificio se configura como un gran cuerpo macizo de hormigón casi blanco, que contiene 21 apartamentos distribuidos en 6 pisos y que se inserta en un zócalo comercial que intenta desaparecer mediante el acristalamiento de su fachada. Las partes solidas de este zócalo se conciben en un tono oscuro que suprime este nivel y entrega una sombra en la que se sostiene el resto del edificio dándole una ligereza al volumen principal.
Cada fachada fue pensada cuidadosamente, y entregan dos maneras distintas de aproximarse al espacio público. Por un lado, una se concibe como un juego de sustracciones a medida que va subiendo de nivel, lo que produce generosos espacios exteriores para los departamentos de los pisos más altos. Por el contrario, la otra se piensa como un elemento liso que se ve interrumpido aleatoriamente por las diferentes aperturas vidriadas. Estas dos maneras de enfrentarse a la calle, encajan armoniosamente en un único cuerpo coherente gracias a la mono-materialidad del volumen.
El uso del hormigón bruto, se ha elegido por ser un elemento unificador -sobrio y elegante-, por su cualidad robusta y duradera, como también por su ventaja estructural a la hora de crear espacios exteriores que son un verdadero atractivo y que favorecen un uso cualitativo a largo plazo. El acabado pulido, muy similar al metal, se logró mediante el uso de un moldaje metálico muy liso y un tinte gris claro el cual se finaliza con una capa transparente satinada.