Una estructura de dimensiones gigantescas, con 108 metros de altura, 162 de longitud, 257 envergadura.
Un ejército de trabajadores, protegidos de la radiación por gruesas losas de hormigón, está construyendo un gran arco, enfundado en cientros de metros de reluciente acero inoxidable, lo suficientemente amplio como para cubrir la Estatua de la Libertad. La estructura es tan de otro mundo que parece que los extraterrestres la han dejado caer en este paisaje industrial de la era soviética.
.../... Si todo va según lo previsto, en 2017 el arco de 32.000 toneladas se empujará con delicadeza sobre las almohadillas de teflón para cubrir el refugio destartalado que se construyó para enterrar los restos radiactivos del reactor que explotó y se incendió aquí en abril de 1986. Cuando sus extremos estén cerrados, será capaz de contener cualquier polvo radiactivo en caso de colapso del antiguo refugio.
Para eliminar el riesgo de contaminación atmosférica adicional, el arco eliminará también la amenaza persistente de una repetición limitada de esos días de pesadilla hace 28 años, cuando la lluvia radioactiva envenó las tierras llanas a kilómetros a la redonda y transformó aldeas en pueblos fantasmas, ...
... / ... Con las naciones debatiendo el futuro de la energía atómica como una forma de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y combatir el cambio climático, el arco es también un recordatorio de que la energía nuclear, a pesar de sus beneficios, conlleva enormes riesgos. Cuando las cosas van mal, los desafíos que siguen son enormes.
Los costes son enormes, tan solo el arco de Chernobyl terminará costando alrededor de 1,5 mil millones de dólares, financiado en gran parte por los Estados Unidos y otras 30 naciones. Los ingenieros han diseñado el arco de Chernobyl para aguantar durante 100 años; se imaginan que es el tiempo que puede tardarse en limpiar completamente el área.
Artículo.- The New York Times 27.04.2014.