Lacol organiza el espacio dialogando con la obligada protección urbanística de los edificios, condiciones que finalmente se convierten en aliados para la solución del proyecto, que orbita en torno a un patio central favoreciendo la ventilación, además de la iluminación, y siendo un punto de encuentro social que se convierte en el motor de las actividades.
El programa se desarrolla en planta baja y primera, intentando recuperar la geometría inicial y añadiendo un pequeño edificio de obra nueva en la pared medianera de las viviendas cercanas.
La intervención se caracteriza por una interesante y comprometida aplicación de procesos sostenibles en la construcción y en el mantenimiento energético de la misma, en la que se ha implementado una estrategia climática dividida en tres ejes: invernaderos para captación solar, un depósito de agua de 5.000 litros que aprovecha la lluvia y el uso de materiales centrado en su consolidación y en su comportamiento energético y bioclimático.
La Comunal por Lacol. Fotografía por Baku Akazawa.
La Comunal por Lacol. Fotografía por Álvaro Valdecantos.
Descripción del proyecto por Lacol
La Comunal ocupa la mitad de una manzana del barrio de Sants de Barcelona. Es un edificio industrial protegido, construido en 1926 para la fabricación de velas navales. Actualmente es el espacio de trabajo de ocho entidades, incluida Lacol.
En la intervención se ha recuperado la geometría inicial, rehabilitando las naves originales y añadiendo un pequeño edificio de obra nueva en la pared medianera de las viviendas vecinas. El patio central, además de permitir la ventilación y la iluminación de todos los espacios que lo rodean, es un elemento de centralidad en el que encontrarse.
Las naves, salvo el restaurante y sala de conciertos, han recibido un tratamiento de mínimos. En las cubiertas, después de sacar las piezas de fibrocemento con amianto hemos colocado chapa de acero galvanizado ondulada y así diferenciar aquellos materiales añadidos en proyecto de aquellos existentes.
Hemos dividido en tres ejes la estrategia climática. Empezando por el aire, se han incorporado invernaderos para captar calor solar, reduciendo los metros cuadrados climatizados. Por lo que respecta al agua, un depósito de 5.000 litros permite aprovechar el agua de las cubiertas para el riego y la limpieza. Finalmente, la intervención material de las naves se ha centrado en su consolidación y en su comportamiento energético y bioclimático. Se ha mejorado el aislamiento con morteros de cal y corcho que aseguran la compatibilidad y comportamiento con los materiales y técnicas requeridas en una intervención patrimonial. Se han podido reutilizar 1.200 metros lineales de viguetas como bordillos donde colocar el aislante de cubierta. Soleras y otros elementos en contacto con el terreno se han aislado con restos de los aislamientos rígidos provenientes de la industria del panel sandwich.
La Comunal por Lacol. Fotografía por Álvaro Valdecantos.
1 Estrategia de Implementación
La Comunal ocupa la mitad de la manzana comprendida entre las calles de En Blanco, Tenor Masini y Riera de Escuder. Es un edificio catalogado con la categoría C y urbanísticamente es una volumetría disconforme. En 1926 faltan 3 años para que Barcelona reciba la exposición universal de 1929. Ese mismo año se inaugura la línea 1 del metro. Son los años previos a un momento importante para una ciudad que se está dotando de infraestructuras. Es en este contexto que se construyen las naves que serán almacenes de velas navales para más adelante convertirse en manufactura de estas.
Vaciado y recuperación de la geometría original
La volumetría previa a la obra había desdibujado la forma original. Lo que hoy es patio, pasarelas y accesos era una planta baja totalmente construida y cerrada. La primera fase de la intervención ha sido recuperar la geometría inicial y devolver al barrio las naves que la han conformado.
Medianera equipada
La pared medianera de las viviendas vecinos se convierte en fachada a edificar con la obra nueva los espacios comunitarios que equipan el complejo.
Rehabilitación de espacios
Las naves, excepto el restaurante y sala de conciertos, reciben un tratamiento de mínimos donde la prioridad es consolidar el conjunto estructuralmente y flexibilizar las posibles maneras de ocupar con unas instalaciones modulares y adaptables. Exteriormente ha sido importante estudiar la composición original de las fachadas para intervenir respetuosamente.
Patio y circulaciones
La obra nueva renuncia a una forma en planta más óptima para conseguir un patio y unas circulaciones que sigan la alineación original del complejo. El patio, que unido a la sala polivalente hacen un todo, se entiende como la platea o escenario de un teatro donde las pasarelas, haciendo de balcones le rodean.
La Comunal por Lacol. Fotografía por Álvaro Valdecantos.
2 Programa de usos
La Comunal siempre ha sido un lugar de trabajo, antes manufactura y almacenamiento y ahora servicios, no ha dejado de ser un equipamiento profesional en sus 95 años de historia.
Usos
Los usos originales por los que las naves fueron proyectadas eran los de vivienda, tienda y almacén y los usos para los que han sido rehabilitadas son los de tienda, oficinas, sala de conciertos, restaurante y espacios comunitarios. La flexibilidad otorgada por la clara separación de los espacios servidos respecto de los servidores ha sido clave para poder meter más usos. La creación de una tercera franja de espacios servidores que nace de la esquina norte del restaurante organiza el patio, el edificio nuevo y hace que las circulaciones de todo el complejo sigan el mismo ritmo.
3 Estrategia Patrimonial
Se trata de un testimonio fabril de medidas domésticas de los que quedan muy pocos en pie. Alarguemos su ciclo vital y recon-vertimos la industria textil en cultura cooperativa vinculada al barrio.
Volumetría
Es necesario respetar la forma original de las naves de la misma manera que es necesario aplicar una mirada energética al patrimonio. El resultado de este debate han sido los invernaderos situados sobre los espacios intersticiales donde se ubican los accesos y los espacios servidores. A pesar de desdibujar el contorno conseguimos enfatizar la secuencia de las tres naves separadas entre ellas mediante elementos captadores y disipadores de temperatura.
El vaciado del patio es el otro hecho que nos permite recuperar y reconocer como eran las naves antiguamente. Aparte de permitir la ventilación y la iluminación de todos los espacios que la rodean, es un elemento de centralidad donde encontrarnos y donde todo lo que está más allá del trabajo pueda suceder.
La Comunal por Lacol. Fotografía por Álvaro Valdecantos.
Acceso
Las fachadas principales nos recuerdan que la vía principal, aunque en los años 20, era la calle de en Blanco. Hoy, el transporte motorizado ha hecho desaparecer el animal y las pendientes de las calles ya no son un problema, así que el acceso principal es por la calle de Sants. Sin embargo, la trama urbana ha cambiado adaptándose a este cambio y las naves, fuera de alineación, provocan ensanchamientos de la calle marcando los accesos al complejo.
Fachadas
De composición ecléctica en tiempos de oscuridad política nos hemos encontrado con unas fachadas con dos estucados solapados del año 1926, el primero, y de los años 1940, el segundo. Asesorados por los especialistas en restauración hemos optado por recuperar el primer estilo, con una paleta de colores y formas más cercana al modernismo. Este proceso se llama empobrecimiento de las fachadas.
Cubiertas
Tras sacar las piezas de fibrocemento con amianto y con la intención de conseguir una cubierta ligera, hemos colocado chapa ondulada de acero galvanizado y así diferenciar aquellos material añadidos en proyecto de aquellos existentes. Por otra parte y con la voluntad de reutilizar aquellos materiales que se encuentran en buen estado, hemos podido reutilizar más de 1.200 metros lineales de las viguetas que soportaban el cielo raso para crecer los 15cm de aislamiento sobre el entablado de cubierta .
4 Estrategia climática, ecológica y urbanística
Hemos dividido en distintos ejes la estrategia de sostenibilidad, incidiendo en cuestiones materiales y climáticas que afectan a las demandas y consumos energéticos.
Aire
Los invernaderos y la reducción de los metros cuadrados climatizados han sido las líneas de acción que han vertebrado este eje.
Con los invernaderos pretratar el aire de renovación de las oficinas, precalentando a invierno y disipando el máximo de calor en verano.
Los espacios de circulaciones, office, aseos y accesos no reciben tratamiento de confort térmico y en algunos casos ni siquiera hay protección a la lluvia.
Construir menos y climatizar menos todos aquellos lugares considerados de paso ha sido el resultado de un debate sobre reducción en impactos.
La Comunal por Lacol. Fotografía por Álvaro Valdecantos.
Agua (azul y verde)
Ante la dicotomía que plantea utilizar agua potable para el riego o la limpieza, el aprovechamiento de las aguas pluviales era la opción más idónea para encarar el segundo eje. Bajo el patio hay un depósito de 5.000 litros de agua recogida por las cubiertas de las naves. En una segunda fase del edificio nuevo y el patio recibirán un proceso de verdificación con sistemas de riego conectados al depósito.
Materiales (gris)
La intervención material de las naves se ha centrado en su consolidación y en su comportamiento energético y bioclimático. La posibilidad de aislar los paramentos, evitar los puentes térmicos y conseguir la mayor inercia térmica ha sido posible gracias a los morteros de cal y corcho que aseguran la compatibilidad y comportamiento con los materiales y técnicas requeridas en una intervención patrimonial. Se han podido reutilizar las viguetas como rastreles donde colocar el aislante de cubierta. Soleras y otros elementos en contacto con el terreno se han aislado con la merma de los aislamientos rígidos provenientes de la industria del panel sandwich.
Urbanismo
Asesorados por el equipo de consultores en sostenibilidad y con los refugios climáticos (verde, azul y gris) como referentes, el patio de La Comunal se convertirá en un espacio seguro en términos de urbanismo y clima. Buena iluminación, sombra húmeda cuando hace calor, seguridad, accesibilidad y atención humana son algunas de las características con las que se ha concebido el espacio.