El proyecto residencial desarrollado por NOA* consiste en un tratamiento sutil y elegante de preexistencias históricas en la calle Museo, en el centro histórico de la ciudad, y en el desarrollo de un nuevo volumen con dos fachadas principales y un patio interior. Este, con plantas sobre y bajo rasante, genera una concatenación de espacios domésticos que combinan historia y modernidad para la comunidad, relacionando a los habitantes con las viviendas, el contexto y los vecinos.
«Museumstrasse 42» es un ejercicio de reurbanización y reinterpretación que integra el lenguaje arquitectónico de profundas raíces históricas de los edificios del Renacimiento temprano en la arquitectura contemporánea. Respetando y conservando las fachadas que se vuelcan hacia la calle Museo, el proyecto crea, hacia el interior y a partir de una estructura de bloques de hormigón, siete plantas destinadas a viviendas que unifican el pasado con espacios modernos concebidos para introducir la vida doméstica en el centro de la ciudad.
Residencial urbano «Museumstrasse 42» por NOA. Fotografía por Alex Filz.
Descripción del proyecto por NOA*
En la calle Museo, en el denso tejido histórico de Bolzano, se alza un nuevo edificio urbano sobre el alargado solar que antiguamente albergaba la imprenta del grupo editorial Athesia. El estudio NOA reinterpreta la tipología de las casas urbanas con una composición de fachada refinada y sutil, creando un volumen purista que une con elegancia la historia y el diseño contemporáneo.
El proyecto de reurbanización del solar en la esquina de Via Museo y Via Cassa di Risparmio comenzó en 2016, siguiendo un plan municipal destinado a aumentar la proporción de espacio residencial en el centro histórico de Bolzano. En 2019, el grupo Athesia encargó al estudio de arquitectura e interiorismo NOA la dirección del diseño del edificio residencial en Via Museo 42, que formaba parte del plan de ejecución. Para entonces, el volumen del edificio ya se había definido y aprobado bajo la dirección del estudio Planpunkt.
El nuevo volumen refleja plenamente la escala del centro histórico de Bolzano: se trata de un edificio urbano con una estrecha fachada sobre la Via Museo, que data de finales del siglo XIX, de fina factura, con ventanas de arco apuntado y una torre lateral. Esta fachada ha sido completamente restaurada por razones de conservación arquitectónica, dejando al descubierto una serie de mosaicos que anteriormente estaban ocultos por el yeso. El nuevo volumen se extiende 75 metros hacia el patio interior, con las dos fachadas principales orientadas al este y al oeste. El corto lado norte del edificio da a la Iglesia del Sagrado Corazón. La estructura es de bloques de hormigón, con alturas variables según las distancias requeridas a los edificios adyacentes. Cuenta con siete plantas sobre rasante, con una altura máxima de 23 metros. Además, hay cuatro plantas subterráneas dedicadas a un garaje, cuya construcción se completó en la primera fase del proyecto en 2021. Salvo la planta baja y la primera planta subterránea, que son de uso comercial, todo el edificio es residencial.
NOA aborda el proyecto trabajando simultáneamente en estudios de fachadas y probando configuraciones de distribución para los apartamentos. Operando en el contexto de un centro histórico, los arquitectos se han involucrado con la tipología de las casas urbanas y han estudiado cuidadosamente los elementos característicos de los edificios históricos cercanos: los de Via Museo, pavimentados en 1910, y los de Via Cassa di Risparmio, construidos durante el siglo XIX.
«Las casas urbanas del siglo XIX en Bolzano distinguen claramente entre la base, el cuerpo principal de la fachada y la cubierta. Se trata de un lenguaje arquitectónico con profundas raíces en la historia de los edificios del Renacimiento temprano, que perdura hasta la era contemporánea, y lo hemos implementado también en este proyecto.».
Andreas Profanter, arquitecto y socio de NOA.
El tratamiento diferenciado de los componentes de la fachada es sutil y elegante en este caso, logrado mediante un tipo especial de yeso con diferentes tamaños de grano. Además, para suavizar la longitud de la fachada principal, NOA, en consulta con las autoridades de conservación del patrimonio, ha propuesto un ligero cambio de color donde sobresale el volumen.
«La base, de 4,5 metros de altura, está revestida con un yeso tridimensional en tonos tierra. Una fina línea, que recuerda a la hilada, la separa del yeso superior, que presenta una veta más fina y un punteado más oscuro que enriquece la fachada con su contraste. Esta distinción entre la planta baja y los niveles superiores se inspira en ejemplos históricos encontrados en la cercana Via Cassa di Risparmio».
Profanter, arquitecto.
El ático, que alberga un apartamento, presenta un tercer color, también dentro de la paleta de marrones, pero más oscuro, y, gracias a su posición retraída, adquiere un papel secundario en comparación con la fachada subyacente. La fachada se ve rítmicamente marcada por las aberturas de ventanas y logias, en una composición purista donde nada se deja al azar.
«Mejoramos la fachada incorporando marcos de ventana en forma de embudo dentro del espesor del muro perimetral, optimizando el flujo de luz natural y ampliando la vista exterior. Este enfoque, con su gran impacto compositivo, se inspira en los característicos bordes biselados que se encuentran en los edificios históricos de los centros urbanos de la región alpina».
Francesco Padovan, arquitecto.
La ventana de altura completa, a ras del interior y con marco de madera, es el elemento arquitectónico central del diseño de la fachada. En las logias y balcones, la barandilla es de vidrio, integrándose a la perfección en la cuadrícula compositiva. La nueva estructura alberga un total de 48 apartamentos, incluyendo unidades de uno y dos dormitorios, para los cuales NOA ha diseñado los planos de planta y seleccionado los acabados interiores: suelos, sanitarios y módulos de cocina. El sistema de señalización en las distintas plantas, también diseñado por el estudio, enriquece el diseño con coloridos elementos gráficos. Entre las zonas comunes se encuentra una gran terraza ajardinada en la primera planta.
«Los apartamentos que dan a Via Museo son los más espaciosos. Aquí, la fachada histórica se fusiona con la nueva estructura, creando espacios muy evocadores, como la cocina y el salón con el mirador, ubicados en la histórica torre».
Francesco Padovan, arquitecto.
La circulación se organiza en torno a dos escaleras, conectadas por un pasillo que recorre longitudinalmente el edificio. Debido a la presencia de una tienda en la planta baja, la escalera que da acceso desde la Via Museo parte de una entrada lateral del nuevo edificio y accede a la estructura en la primera planta. Se trata de una entrada imponente, con vistas a los pórticos históricos, con una nueva escalera con escalones de arenisca enmarcados en metal, que deja al descubierto los escalones históricos originales como recordatorio de la conexión inicial y conduce a un luminoso atrio con decoraciones de estuco en la primera planta. A la segunda escalera se accede desde el patio interior, que también alberga la rampa que lleva al garaje. Tanto el patio interior como las cubiertas cuentan con espacios verdes con diversas soluciones: jardineras, vegetación extensa e intensa y zonas de césped.
