Tres actitudes, tres expresiones, tres experiencias muy diferentes entre sí resumen los autorretratos o autorrepresentaciones de Jana Leo, Veronika Márquez y Cabello/Carceller. Y los tres recurren a las dualidades, al antes y después, para presentarnos sus versiones del feminismo, lo que pudiéramos llamar, de 5G. Sin remontar a la historia de los derechos de la mujer y el sufragio incluido, además de las reivindicaciones iniciadas en los sesenta y ya conseguidas, el feminismo de quinta generación, de nuestra actualidad, consiste en un escrutinio a nosotras mismas, no de lloriquear sino de tomar la vida por las riendas.