‘Paisajes enmarcados. Misiones fotográficas europeas, 1984-2019’ Exposición en el museo ICO

Esta recopilación fotográfica en el museo ICO trata de hacer reflexionar sobre la transformación del paisaje desde el ojo del fotógrafo. En estas fotografías se observan los distintos cambios sociales, como cierre de minas, crecimiento urbano o el abandono de cultivos, se tradujeron en la modificación del paisaje europeo.
 
La exposición reune ocho propuestas fotográficas de larga duración llevadas a cabo en Europa desde 1984 hasta 2019. La exposición muestra el trabajo de casi sesenta fotógrafos, acompañado por las numerosas publicaciones que se editaron en el contexto de las misiones seleccionadas: Mission photographique de la DATAR (Francia), Mission photographique Transmanche (Francia), Linea di Confine per la Fotografia Contemporanea (Italia), Ekodok-90 (Suecia),Fotografie und Gedächtnis [Fotografía y memoria] (Alemania), Observación fotográfica a largo plazo de Schlieren (Suiza), RO_Archive (Rumanía) y Lugares. Dinamarca en transición (Dinamarca).
 
Estas propuestas tienen en común la reflexión sobre el paisaje en transformación mediante el trabajo de los fotógrafos. Cuando el fotógrafo tiene carta blanca, puede interpretar el paisaje con total libertad. Sin embargo, el enfoque también puede ser muy definido e instrumental, como cuando se trata de investigar visualmente.
 

 
Las mayores transformaciones del paisaje europeo durante los años setenta y ochenta se debieron en gran medida al declive de la industria pesada y al cierre de las minas. Por otra parte, el rápido crecimiento de la economía de servicios y del turismo de masas, y el incremento de la movilidad en general, exigían importantes adaptaciones del paisaje. Las innovaciones tecnológicas cambiaron la agricultura tradicional y, con ello, también el paisaje, que a partir de entonces albergó otros cultivos, y a mucha mayor escala.
 
El progresivo declive de la agricultura tradicional se tradujo en un flujo migratorio hacia las grandes ciudades, al tiempo que sus centros se iban vaciando y surgían los barrios periféricos. En muchas grandes urbes, la consecuencia fue un crecimiento exponencial del extrarradio.
 
El proyecto francés de la DATAR, en los años ochenta, supuso una importante fuente de inspiración para otros promotores de propuestas fotográficas sobre el paisaje. Su incidencia se explica tanto por las ambiciones y la magnitud del proyecto, como por el elenco de fotógrafos seleccionado para participar en él. La DATAR fue una iniciativa especial de un organismo oficial cuyo objetivo era la ordenación del territorio. La planificación de las misiones fotográficas respondía, entre otras cosas, a la conciencia de que los futuros cambios en el paisaje francés tendrían consecuencias drásticas para un número importante de personas.