«Esta forma simple ha sido un elemento presente en mi trabajo desde hace años. El círculo evoca el tiempo, o más concretamente, los fragmentos de tiempo que se amontonan en un vasto escenario de momentos y recuerdos únicos. Es un viaje introspectivo de asombro e imaginación a través de estos destellos del tiempo. Somos un círculo, sin límites, sin principio ni fin. Infinito, Unidad, conexión, solo un círculo en expansión».
Ezequiel Pini comenta sobre el espíritu de El Círculo
El protagonista de la historia, el círculo, es abstracto y diverso. A veces, sugiriendo un orbe celestial luminoso, otros momentos apareciendo como un vacío creciente, el círculo está en un estado de flujo.
El cortometraje es la pieza principal de una colección más grande de imágenes que se lanzó recientemente como una serie de NFT vendidos al Museo Moco, que tiene ubicaciones tanto en Ámsterdam como en la ciudad de Barcelona donde vive el artista. El museo adquirió la pieza por 167.671,00 € (180,000 dólares EEUU) y la expondrá permanentemente en sus dos galerías.
