Los materiales utilizados son el hormigón prefabricado y el vidrio, adquiriendo un gran protagonismo en los grandes ventanales que miran al exterior para ofrecer luminosidad y disfrutar de la naturaleza. De esta forma, los usuarios pueden visualizar detrás de las piezas de madera que encierran los balcones la naturaleza circundante, o el río Paiva que pasa cerca del emplazamiento.
11 habitáculos en el bosque por Summary. Fotografía por Fernando Guerra | FG+SG.
11 habitáculos en el bosque por Summary. Fotografía por Fernando Guerra | FG+SG.
11 habitáculos en el bosque por Summary. Fotografía por Fernando Guerra | FG+SG.
Descripción del proyecto por Summary
Considerando la ubicación remota y la irregularidad de la topografía del terreno, sería extremadamente difícil y costoso formar un sitio de construcción tradicional en esto lugar. Así, en este caso, el uso de estructuras prefabricadas no fué solo una opción, sino la única opción eficiente para simplificar el proceso constructivo, dentro de las condiciones antes mencionadas.
Inicialmente, el objetivo del cliente era distribuir varias habitaciones turísticas por el terreno. Proponemos, entonces, en lugar de habitaciones, casas pequeñas con las condiciones y equipamientos necesarios para una estadía permanente, de modo que algunas puedan funcionar no solo como unidades turísticas, sino como viviendas de uso más prolongado. Al mezclar estos dos programas distintos (turismo y viviendas), garantizamos que este complejo no tendrá un uso estacional, estando habitado durante todo el año. Este enfoque multifuncional promueve la intensidad de ocupación del complejo, favoreciendo su manteniemento frecuente y mejorando la seguridad de ese lugar.
El proyecto se tomó como una oportunidad para experimentar con el sistema de prefabricados Gomos: en un solo módulo en cada vivienda se concentran todas las instalaciones técnicas (agua, electricidad y climatización), que se extienden a los otros módulos externamente. Este procedimiento se repitió a lo largo de la obra, agilizando sus procesos de producción y montaje. El proyecto incluye once habitáculos pequeños con cuatro tipologías distintas que varían entre 28m² y 58m². La implantación de estas unidades estuvo definida por las condiciones naturales del terreno, reduciendo al mínimo esencial su impacto sobre la topografía y vegetación del lugar. Se conservaron los antiguos muros de contención en esquisto, preservando la configuración original del terreno.
Se mantuvieron todos los árboles, las casas se implantaron cuidadosamente alrededor de ellos. El posicionamiento disperso de las unidades y sus distintas orientaciones crean diferentes hilos, despejando la vista desde el interior. Detrás de las piezas de madera que encierran los balcones podemos ver el bosque y, ocasionalmente, el río Paiva.