Por otro lado, Een Spoor van Water tiene una inspiración histórica, recordando a los arroyos fluviales del valle de Drentsche Aa, que también se ve potenciado por un procedimiento práctico en cuanto al aprovechamiento de las formas de los adoquines, los cuales en vez de haber sido sustituidos por otros se han utilizado buscando diferentes posibilidades de ubicación.
Descripción del proyecto por Matthias Oostrik
El paso de los trenes provoca una cascada de luz reflejando el trabajo artístico de Matthias Oostrik.
La instalación lumínica Een Spoor van Water (Un Sendero de Agua) del artista Matthias Oostrik se presentó hoy en un nuevo paso elevado de ferrocarril en la ciudad holandesa de Assen. Cada tren que pasa activa una composición de luz única, incorporada en el pavimento y en la zona inferior. Se trata de una cascada de luz que cae sobre su propio hormigón y serpentea por sus laderas cubiertas de vegetación. Situada en el lecho de un arroyo histórico, la obra de arte conecta el flujo natural de agua con los flujos de tráfico urbano contemporáneo del sitio. La instalación de luz es la gran conclusión de una serie de proyectos de arte que conectan la ciudad con su entorno verde e histórico, siendo la segunda obra de Matthias Oostrik dentro de este área.
Las obras de arte de Matthias permiten conexiones nuevas e inusuales entre las personas y su entorno. Utilizando tecnología digital, sus monumentales instalaciones responden al paso de los visitantes con luz, vídeo o sonido que van cambiando, lo que permite a los visitantes remodelar su entorno. Sus obras en el espacio público también son funcionales. Contribuyen a una sensación de seguridad y están diseñados para durar.
Un ejemplo parecido a este y que tuvo un buen recibimiento de su trabajo es el Bijlmer Moodwall (2009), ubicado en una vía peatonal en Amsterdam. Esta instalación de 24 metros de largo produce reacciones en los visitantes con patrones de luz rítmicos, que convierten el túnel sombreado en un lugar agradable donde estar. En De Assen van Assen (2018), los transeúntes también activan divertidos rayos de luz que se mueven a su alrededor. Los trenes que atraviesan el paso elevado desencadenan un rastro de agua. Los ciclistas y peatones que pasan por debajo pueden disfrutar de la encantadora cascada de luz.
Un Sendero de Agua (A Trail of Water) que no solo conecta los diferentes flujos de tráfico. También toca la historia de la ciudad de Assen. Las mareas de luz oscilantes se refieren a los arroyos históricos que solían correr aquí en el valle de Drentsche Aa.
Matthias también se inspiró en temas más prácticos. Por ejemplo, el terraplén del paso subterráneo estaría cubierto con adoquines sin brillo en forma de H. En lugar de cubrirlos o reemplazarlos, Matthias incorporó los bloques en una composición oblicua y angular, creando la ilusión de una cascada de luz. Para lograr esto, 500 de los bloques fueron equipados con módulos LED diseñados a medida.